El bebé de Rafa Nadal y Mery Perelló podría nacer prematuramente

Hace unos días nos enterábamos de que Mery Perelló tenía que ser ingresada debido a complicaciones de su embarazo. La mujer de Rafa Nadal sigue en el hospital ya que a sus 31 semanas de gestación, los médicos le han recomendado reposo absoluto al menos hasta la semana 34 para asegurarse de que todo está bien. Tres semanas que deberá continuar ingresada mientras el tenista se encuentra en Nueva York disputando el US Open.

Según informa 'La Razón', los motivos de esta permanencia en el hospital no son graves pero sí que se quieren asegurar de que el bebé siga cogiendo peso. De hecho, los futuros padres ya tendrían asumido que el bebé nacerá de forma prematura.

También ese sería el motivo por el que en el caso de que a Mery Perelló le den el alta esta no volvería a su casa con Nadal en Porto Cristo sino que se quedaría en la vivienda de su cuñada Maribel en Palma para tenerlo todo bajo control. ¡Esperamos que todo salga superbien!

Nadal y su encontronazo con la prensa

Por su parte, Rafa Nadal sigue en Nueva York y aguantando el 'chaparrón' de algunos reporteros que le preguntan que si el ingreso de su mujer es el motivo por el que tarda tanto entre saque y saque. "Debe de ser una broma", respondía Nadal al reportero antes de dar explicaciones muy precisas sobre su situación particular: "No creo que los árbitros me traten de forma diferente. Mira, tengo un problema y es que sudo mucho, especialmente en estas condiciones de humedad. Los recogepelotas ya no te traen la toalla como hace dos años, tienes que ir al otro extremo de la pista para recogerla. Me han dado muchas advertencias en mi carrera. Nunca por tirar la raqueta o por perder los papeles en la pista, pero sí por el tiempo de saque", ha asegurado antes de que el periodista volviera a la carga, demostrando que había malinterpretado su respuesta.

"¿Crees que debe haber normas especiales para ti porque sudes mucho?", ha replicado para más enfado de Nadal, quien tenía que reírse para poder contener sus gestos de estar flipando en colores. "Yo nunca he dicho eso, yo cumplo con las reglas. Si me paso de los 25 segundos, me ponen una advertencia. Y si no, mira el reloj. No sé muy bien qué pretendes con esto", contestaba sin despeinarse ni un pelo.