A Michele Morrone le va a durar el enfado por sus fotos desnudo... '365 días'

Esta misma semana han salido a la luz unas fotografías robadas durante el rodaje de la esperada secuela de la película '365 días', la respuesta de Netflix al fenómeno de cine erótico que inició 'Cincuenta sombras de Grey' y que ha cosechado tanto éxito entre los usuarios de la plataforma de streaming como reacciones negativas de la críticas especializada.

La continuación de la historia llegará cargada de tantas escenas subidas de tono como la original si se toman como referencia las fotografías del protagonista, Michele Morrone, rodando un desnudo integral en una ducha con una ventana panorámica que han obtenido los paparazzi. El intérprete no ha tardado en reaccionar a la publicación de estas instantáneas para lamentar que se haya violado de esa manera su derecho a la intimidad.

"Como actor, tu vida se vuelve pública. Pero como ser humano, aún me gustaría proteger la mía. Y soy un gran fan de la privacidad. Nunca está bien invadir la de otra persona y resulta una falta absoluta de respeto", ha afirmado en un comunicado difundido a través de sus Stories de Instagram.

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El actor ha querido agradecer el apoyo de todas las personas que han denunciado esas fotografías suyas sin ropa, que no han tardado en correr como la pólvora por las redes sociales, en un intento por limitar su difusión, ya que se tomaron mientras trabajaba en un set profesional donde él tenía el control absoluto sobre su cuerpo y qué partes del mismo mostraría ante el mundo cuando se estrene finalmente la película.

"Lo que ha sucedido resulta muy ofensivo para mí. Aprecio mucho lo que habéis hecho, como siempre", ha concluido.

Sin duda, el actor tiene derecho a quejarse: las imágenes no solo vulneran su derecho a la intimidad, sino que estropean la cada vez más difícil de guardar sorpresa para el público. Michele, además, se caracteriza por cuidar mucho lo que publica en sus redes, como modelo y cantante (y persona en el siglo XXI, en general), sabe que lo que publica forma la imagen que el público en general tendrá de él, así que lógicamente los robos de paparazzi son gajes del oficio, pero molestos al fin y al cabo.