La contaminación en Barcelona llega ya a niveles críticos. Mis amigos se reían cuando decía que al volver a Lleida, mi ciudad, podía llenar mis pumones de aire un poco más fresco. Es triste ver la ciudad llena de esa neblina contaminada que le quita todo lo romántico y bonito que tiene Barcelona. Recientemente el Ayuntamiento ha iniciado un protocolo de prevención que entre otras cosas obliga a disminuir la velocidad de los vehículos en los accesos de entrada e instando a las empresas a reducir las emsiones de dióxido de nitrógeno. Esta segunda medida debería ser permanente, y si el Ayuntamiento quiere que baje la contaminación debería, por ejemplo, favorecer el transporte público bajando su coste en vez de subirlo año tras año, o velar siempre por la calidad del aire de Barcelona en vez de activar protocolos momentáneos.
Si quiere debatir sobre este tema, escríbanos aquí
Envía una carta del lector, opina sobre la actualidad y haznos llegar testimonios, denuncias y sugerencias para publicar en la edición impresa y en la web.
MOVILIDAD - Alessandro Malfatti (Barcelona)
SERVEIS - Enric Alfonso (Salou)
BARCELONA - José María Mateo (Santa Coloma)
ACTUALIDAD - Pablo Fuentes (Valladolid)
POLÍTICA - Antoni Tort (Barcelona)