Ya no habrá cartas de Holanda para Melendi

Melendi no ha dudado en pronunciarse con total sinceridad sobre el cambio de mentalidad que experimentó hace ya unos años y que, entre otras cosas, le llevó a renunciar para siempre a aquellas cosillas un pelín ilegales que formaban parte de su día a día, especialmente la marihuana, a la que solía recurrir para inspirarse.

"Hay una creencia profunda que tuve que vencer. Al final nos acabamos creyendo que si dejamos de hacer ciertas cosas, vamos a perder la creatividad, pero eso es mentira. No creo absolutamente en nada de eso", ha explicado el asturiano a su paso por 'El Hormiguero' mientras hacía referencia a la "constancia" y a la "disciplina" como los verdaderos motores de su carrera profesional.

"Creo en la constancia. Yo tengo un horario de oficina. Soy un trabajador de la música. Me levanto por la mañana, llevo los niños al cole, me siento en el piano, me tiro dos horas tocando porque me gusta. Es esa disciplina la que me ayuda a componer", conversaba con Pablo Motos.

Al margen de sus responsabilidades como marido y padre, sin olvidar su labor de coach en 'La Voz' y, por supuesto, la madurez que ha ido acumulando con el paso del tiempo, lo cierto es que el artista no tuvo que pensárselo demasiado antes de tomar la decisión de renunciar para siempre al consumo de cannabis, ya que fue su propio cuerpo el que le dio un toque de atención para que cambiara radicalmente de hábitos. Si es que, el cuerpo es muy sabio, amigo.

"Fue bastante sencillo para mí porque me empezaron a sentar mal, así que un día decidí dejarlos", comentaba Melendi justo antes de que el periodista le planteara una situación hipotética. "Si estás en una fiesta y pasa un 'peta' cerca, ¿no te dan ganas de darle una calada?", le lanzaba. "Ni una calada le doy, como mucho hago así (aspirando por la nariz)", respondía tajante el cantante.