¿Oyes los gritos de Sofía Suescun y Alejandro Albalá? Es la bronca más grande de 'GH DÚO'

Más vale que saquen a toda esa gente de 'GH DÚO' porque van a terminar tirándose de los pelos. Desde luego está siendo una de las ediciones más polémicas y es que juntar a exparejas... Quizá no era tan buena idea y más desde la repesca de Sofía Suescun, que trae a Alejandro Albalá de cabeza. Montaje o realidad pero estos dos no pueden estar ni juntos ni separados y la última bronca que han tenido en directo lo confirma.

Ambos están nominados y les ha tocado hacer la famosa 'curva' (esa prueba que los de 'GH' se empeñan en poner para que a más de uno le de un parraque). La curva de su relación que por lo que se ve tiene más baches que otra cosa...

Si pensabas que esto les ha acercado más te equivocas porque una vez más han sacado los trapos sucios y... Huelen que apestan. ¡Les ha faltado tirarse las pizarras a la cabeza!

"Descubrí que hablaba con bastantes chicos. Mucho perdón no me pidió", dice Albalá de Sofía.

Después de hablar de los comienzos de su relación y de las rayadas que tenía Albalá en la cabeza, llegó el plato fuerte y prepárate porque curvas no, lo que vienen son gritos y bien fuertes...

A Jordi González se le ocurrió desde plató la feliz idea de preguntar por la relación con las respectivas madres y ojo porque... No les toques a las madres que por ellas MA-TAN.

Sofía reconoce que Maite Galdeano no ha sido la mejor compañera de piso (que ya sabemos que cuando se pone consigue que te de hasta un ataque de ansiedad) y que por ella tenían mucha falta de intimidad. Mientras que Alejandro confirmaba que la madre de Sofía era un 'problema'.

Lo que ha venido después te lo puedes imaginar: reproches, gritos y hasta zarandeos. Una imagen vale más que mil palabras.

Ahora ya es definitivo que no podemos esperar una reconciliación, y aunque con ellos nunca se sabe... Sofía lo ha dejado bien clarito en la pizarra (a ver si nadie lo borra): su relación se termina en día 28 de marzo de 2019, o sea ya.

A ver lo que les dura el cabreo...