¿Puede España alcanzar el 100% de energía verde?

Textos: Agustí Sala y Sara Ledo
Infografías: Ricard Gràcia / Ramon Curto


La producción de energía renovable va creciendo año tras año en España y ganando terreno a las fuentes más contaminantes.

EVOLUCIÓN DE LA GENERACIÓN DE ENERGÍA EN ESPAÑA

Vista esta progresión, ¿se podría alcanzar una producción del 100% de energía verde en España? ¿Qué se necesitaría para conseguirlo?

GENERACIÓN TOTAL DE ENERGÍA EN 2021

El año pasado, la generación de energía eléctrica en España llegó a 242.401 gigavatios por hora (GWh) y se acercó a los niveles de 2019, tras el parón que supuso la pandemia en 2020. Del total, el 45,6% procedía de energías renovables y el 53,5%, del resto.

FUENTES RENOVABLES

Entre las energías renovables sobresale especialmente la eólica, con el 23,4% del total, lo que la situó como la primera fuente de producción de energía eléctrica en 2021.

A la hora de hacer proyecciones con estos datos hay que tener en cuenta que la generación de energías renovables, en tanto que dependen de factores como la meteorología, es muy variable según los días.

Por ejemplo...

El 30 de enero del año pasado el 69,19% de la demanda eléctrica se cubrió con energías renovables, lo que fue un auténtico récord. El mínimo fue el 10 de octubre de 2017, con el 13,55%.

Estas variaciones se producen a lo largo de todo el año, ya que depende de si hace más o menos viento o más o menos sol. Por ello se trata de fuentes energéticas que requieren de grandes inversiones en almacenaje si se quiere sacarles el mayor partido.

Una muestra de los altibajos y variabilidad lo encontramos, por ejemplo, entre los días 1 y 8 de este enero de 2022.

  • El día 4, la eólica cubrió el 41,4% de la demanda; y el día 2, el 18,3%.
  • Lo mismo ocurre con la solar fotovoltaica: el día 7 cubrió el 7,1% del total y el día 4, el 4,19%.
  • Y si cogemos el conjunto de las renovables: el 5 de enero significaron el 56,7% del total de la demanda y el día 2, el 38,3%.

Teniendo en cuenta estas prevenciones, ¿cómo se podría aumentar la producción de energía verde en detrimento de las fuentes contaminantes?

Las que siguen son unas estimaciones y comparaciones calculadas a partir de los datos de 2021.

CARBÓN

En la España peninsular, el año pasado, las centrales de carbón, que tienen previsto su cierre en el año 2030, generaron 4.942 gigavatios hora (GWh), el 2% del total.

Eso significa que en ese periodo de tiempo, por ejemplo, para ahorrarse ese tipo de energía contaminante, hubiera hecho falta incorporar más de 1.600 megavatios (MW) de potencia eólica para cubrir esa parte de la demanda con energía eólica.

Todo ello, traducido en maquinaria, supondría según algunas estimaciones sumar unos 329 aerogeneradores a los existentes en la actualidad, dado que la potencia media actual por dispositivo es de unos 5 MW pero la tendencia es al alza y, además, a medida que se incorpore la eólica marina, con la que un único aparato puede tener el triple de potencia que uno terrestre, se pueden reducir las unidades necesarias.

Cabe señalar, sin embargo, que no todos los cálculos y estimaciones arrojan el mismo resultado. Hay muchas divergencias.

  • Por ejemplo, según un informe de la Cambra de Comerç de Barcelona, solo en Catalunya, para lograr la descarbonización en el año 2050 haría falta que el consumo de renovables fuera 13 veces mayor que en la actualidad. El mismo estudio sostiene que, para lograrlo, el 18% del territorio debería estar ocupado por placas solares y aerogeneradores (también marinos), y para ello se tendrían que invertir 59.000 millones de euros en tres décadas.
  • Sin embargo, otros estudios, reducen de forma drástica estas cifras y estiman que con cubrir el 0,97% del territorio, lo que son unas 33.000 hectáreas, de las que 27.000 serían de solar fotovoltaica y 6.000 de eólica, bastaría para cubrir una demanda 100% renovable.

¿Y LAS NUCLEARES?

Más difícil si cabe supondría acabar con la generación de energía nuclear. El parque nuclear en España suma una potencia de poco más de 7.000 MW, a razón de en torno a 1.000 MW por central, y actualmente tiene un peso relevante en la generación de energía.

La nuclear cubre en torno al 21% de la demanda, pero con mayor estabilidad de funcionamiento, es decir, unas 8.000 de las 8.760 horas del año.

Para sustituirla, la única vía pasa por una combinación de distintas tecnologías. Por ejemplo, la eólica, que tiene una media de funcionamiento de unas 3.000 horas anuales y la solar fotovoltaica, con una media de unas 1.600 horas anuales.

De todas formas, a medida que la eólica marina gane peso, podrá aportar más. Un solo aerogenerador en el mar aporta lo que tres en tierra y, además, durante más horas, explican fuentes de la patronal Asociación Empresarial Eólica (AEE).

Si se cerraran de un día para otro las centrales nucleares (un escenario muy hipotético) se requerirían unos 17.500 megavatios (MW) de potencia nueva eólica (en la actualidad el parque total es de unos 28.000 MW) y un total de 21.500 aerogeneradores, lo que supondría unos 3.300 aerogeneradores.

Siguiendo con este ejercicio teórico, aún requeriría mayor esfuerzo sustituir de golpe todas las energías no renovables con, por ejemplo, la eólica. Eso supondría añadir casi 47.000 MW de potencia nueva (casi el doble de toda la existente en la actualidad y más de 9.000 aerogeneradores (hoy el parque está formado por unos 21.500).

DIFERENCIAS ENTRE ELÉCTRICO Y ENERGÉTICO

Es preciso destacar que no todas las fuentes de generación son para electricidad y que hay determinadas industrias y sectores que se nutren de combustibles fósiles (del diésel al gas) hoy en día imposibles de reemplazar, lo que aleja el objetivo del 100% verde.

De ahí que el plan nacional integrado de energía y clima (Peniec) 2021-2030 estima que en el año 2050 el 97% del consumo final se realizará con energías renovables. En electricidad será el 100%; en calor y frío, el 97% y en transporte, el 79%.

CONCLUSIÓN

Está previsto que para el año 2050 las energías renovables sean las mayoritarias: el 100% para generar electricidad, por ejemplo. Pero, para ello hay que comenzar desde ya a aumentar el peso de las distintas tecnologías renovables para que haya un 'mix' que permita cubrir las carencias de otras tecnologías contaminantes, menos beneficiosas para el medioambiente y, especialmente, determinar cuál es el futuro de la energía nuclear que, actualmente cubre entre la quinta y la cuarta parte de la demanda.

Los ciclos combinados, que producen la energía mediante gas, cubren en torno al 17% de la demanda, pero son la fuente que actúa de colchón del sistema cuando no basta con las energías renovables. Tanto la nuclear como los ciclos combinados están llamados a desaparecer, si bien la Comisión Europea propone considerarlas como energías verdes durante el periodo de transición hacia la descarbonización. Esto ha provocado la protesta de países como España, que avisan de que esta medida desconcertaría a los inversores y supondría un paso atrás en el camino hacia la sostenibilidad.

Por otra parte, además de la necesidad de que quede establecida una línea política clara y unánime, cabrá redoblar la inversión tecnológica y no solo desde el punto de vista de la generación, sino también del almacenamiento de la energía producida, uno de los puntos débiles actuales de las renovables.


Este reportaje se ha publicado en EL PERIÓDICO el 22 de enero de 2022

Textos: Agustí Sala y Sara Ledo
Infografías: Ricard Gràcia y Ramon Curto
Coordinación: Rafa Julve