Así ha sido nuestra cita con Can Yaman

Hemos estado con el actor turco que enamora a medio mundo... Moríos de envidia, amiguis

Can Yaman.
Can Yaman. / GETTY

Sí, nos sentimos unas de las mujeres más envidiadas del planeta porque SÍ hemos estado con ÉL, con Can Yaman, el hombre del momento... Podríamos deciros que es un divo, que en persona no resulta tan guapo, que es un pelín antipático, pero no, es un pibón por fuera y por dentro.

El actor turco ha estado tres días en España de promoción y ha causado un auténtico caos entre sus fans colapsando la centralita de Mediaset y haciendo que intervenga la policía en el hotel y el aeropuerto (reinas, se os ha ido un poquito de la manos el recibimiento). Pero él está encantado y declara su amor incondicional por todas sus admiradoras (nosotras nos incluimos en su club, claro).

"Me siento un tema muy importante. El recibimiento ha sido extraordinario, gracias a todos. Me hubiera pasado horas haciéndome fotos con mis fans. Hay que corresponder a tanto amor", ha dicho. Vestido con vaqueros, botas militares y camisa negra abierta, Yaman ha confesado que no ha tenido mucho tiempo de disfrutar de Madrid, por eso está deseando volver pronto. Sabemos que os encanta el look del actor, pero os anunciamos que tendrá que cortarse el pelo y la barba para hacer el servicio militar en su país natal. Él mismo nos lo ha confirmado: "Tengo que hacerlo porque en Turquía no se permite hacer el servicio así. Me han ofrecido donar mi pelo a alguna asociación de enfermos de cáncer".

Can Yaman, en España.
Can Yaman, en España. / GTRES

Can también ha hablado de las mujeres españolas y dice: "Son apasionadas y calientes, espero poder explorarlo...". ¿Perdona? ¿Está acaso diciendo que le gustaría tener un shippeo, chuleo o similar con una española? Morimos de la emoción. Para que os vayáis haciendo una idea de cómo le gustan a él las chicas: "No tengo prototipo de mujer ideal, pero me gustan que me haga reír, que no se estrese y que sea sincera". Candidatas, a practicar los chistes.

Y para terminar, Yaman se pone profundo, levanta la ceja en plan Sobera nos cuenta cómo está viviendo esta abrumadora popularidad: "Aún lo estoy digiriendo. No hay palabras para describirlo, pero tengo los pies en la tierra y no voy de presumido". ¿No es para quererlo?

Síguele la pista

  • Lo último