Sara Carbonero quiere ser madre, pero por ahora son solo kilos

Sara Carbonero (35) ha vuelto a su querido Madrid para ejercer como nueva madrina de las gafas de sol Polaroid y, de paso, satisfacer la curiosidad de todos aquellos reporteros que han venido preguntándose últimamente si la presentadora y su marido, Iker Casillas, se han decidido ya a convertirse en familia numerosa. Vamos, que muchos la daban ya por embarazada con verla en foto...

"A mí me gustaría y nos sigue apeteciendo mucho, pero es verdad que con este ajetreo mío, es difícil", ha reconocido durante la ronda de preguntas posterior a la presentación, revelando además que Iker y ella tampoco han descartado de plano la idea de recurrir a la adopción. "Veo el mundo de color de rosa porque lo veo bonito. Estoy contenta, así que eso significa que es una buena etapa", ha añadido para subrayar el momento de estabilidad que vive a todos los niveles.

Como Internet y las personas somos así, lo mismo se le añaden hijos que ella tiene que echar el freno a los 'haters' (como le pasó hace poco) porque en otras fotos lo que se señalaba era su delgadez... Pasan las semanas y ahora que Sara parece que, según algunos otros, tiene una figura algo más curvilínea (prácticamente imperceptible, la verdad), no han tardado en circular rumores acerca de un posible embarazo que, sin embargo, ella desmiente con fuerza.

"He ganado tres kilos. Volví a comer como yo como siempre, que es regular, y enseguida engordé. Además, ya no hago la rutina de Pilates y de gimnasio que solía tener en la tele", ha contado sobre el estilo de vida ligeramente sedentario que la define estos días.

Vamos, que desde que se pueden ampliar las fotos en Instagram, parece que nadie se libra del zoom y los embarazos con los que, de momento, no contaba...