Kaley Cuoco, a puntito de perder una pierna al caer de un caballo

En plena feliz noticia por su primer embarazo, a Kaley Cuoco casi le amputan una pierna tras un accidente de equitación. ¡Pero qué sustazo! La actriz de 36 años, que como te decíamos espera su primer hijo con su novio, Tom Pelphrey, estaba montando a caballo en un rancho de Los Ángeles en 2010, cuando se asustó y ella se cayó, antes de que el caballo intentara saltar sobre ella y cayera sobre su pierna izquierda. No imaginamos el dolor que tuvo que sufrir... OMG.

La famosa actriz de televisión tuvo que ser trasladada rápidamente al hospital con graves lesiones. algo que afectó a su trabajo en esos momentos, tal y como lo cuenta el creador de 'Big Bang Theory', Chuck Lorre, quien se lo contó a Jessica Radliff para su nuevo libro 'The Big Bang Theory: The Definitive, Inside Story of the Epic Hit Series': "Ese fue el momento más oscuro y aterrador de los doce años de la serie. Kaley podría haber perdido la pierna. Fue una serie de milagros lo que nos permitió superar eso y que ella resultara ilesa". Tal cual.

El coprotagonista de la serie que marcó nuestra vida, Johnny Galecki, añadió: "Estaban hablando de amputarle la pierna, lo que fue devastador".

Los médicos creyeron en un principio que la actriz no podría caminar durante meses, pero después de dos semanas en el hospital, le pusieron una bota con la cual pudo volver a ponerse de pie.

Chuck cree que fue "un regalo del cielo" encontrarse con el doctor Stephen Lombardo, de la Clínica Ortopédica Kerlan Jobe de Medicina Deportiva del Cedars-Sinai, y pedirle ayuda con la lesión de la actriz: "Fue una intervención absolutamente milagrosa que me encontrara con el doctor Steve. Cada vez que le veo, le digo: '¡Gracias! ¡Has salvado a Kaley! En un nivel menor, ¡has salvado 'The Big Bang Theory'!". En menos de dos horas, Kaley estaba "en el quirófano con los mejores cirujanos para detener una infección porque su pierna estaba muy abierta".

En un extracto del libro obtenido por la revista People, Kaley admitió que pensar en el accidente aún le genera mucho dolor: "Antes de entrar en el quirófano, me hicieron firmar algo que decía: 'No sabremos el resultado hasta que entremos y veamos la pierna. Podríamos salir sin ella'. No era el caso, obviamente, pero tuve que firmar la autorización".

La actriz ha contado también que una semana después ya estaba de pie y trabajando, a pesar de que los médicos habían actuado como si nunca pudiera volver a caminar: "Todavía es demasiado para mí y sonaba mucho peor de lo que era. Por supuesto, todo el mundo se asustó, lo cual entiendo. Asusté a la gente".

Menos mal que ahora con su embarazo podrás olvidarse un poco de este tremendo sustazo... Ains.