J Balvin estuvo a punto de ponerse otro nombre artístico ¡y menos mal que no lo hizo!

Y no, no era Daddy Osorio.

J Balvin canta su tema 'Mi Gente'
J Balvin canta su tema 'Mi Gente' / JLJ

Los fans de la estrella del reguetón saben que legalmente J Balvin se llama José Álvaro Osorio Balvín y que el nombre que utiliza a nivel profesional es una combinación de su inicial y del apellido de su madre, que resulta además fácil de pronunciar tanto en español como en inglés. Antes de decidirse por este nombre artístico, el cantante barajó otras posibilidades y ahora ha desvelado que, si hubiese decidido escuchar a las personas de su entorno, el mundo podría haberle conocido como 'Scotch Bonnet', que resulta ser una salsa muy picante.

También podría haberse llamado wasabi
También podría haberse llamado wasabi

"Cuando estaba buscando mi nombre artístico, uno de mis amigos raperos me dijo que debería usar uno picante, como 'Scotch Bonnet'. Y ahora por fin comprendo a qué se refería", ha explicado en el programa 'Hot Ones', en el que curiosamente se ha topado con este condimento mientras comía alitas de pollo a lo largo de la entrevista. ¿Será por eso por lo que las 'Spice Girls' eligieron ese nombre? Ahora todo cuadra...

La idea de usar un alias le resultó muy útil en sus inicios, cuando se encargaba de manejar personalmente todos los aspectos de su carrera, porque le permitía contestar a las llamadas de trabajo como Jose para que diera la impresión de que contaba con un gran equipo a su alrededor. "Solía ser mi propio mánager. Veías mi nombre, Jose, hablando en representación de J Balvin. Respondía al teléfono diciendo: '¿Quieres a J Balvin? Déjame hablar con él y ver si le interesa y si su agenda está libre'. Y era todo yo", ha recordado sin poder contener la risa.

Seguramente no será el único artista que haya utilizado el truqui de fingir que tenía manager o secretaria al principio para intentar darse un poco más de importancia, pero el hecho de que lo haya reconocido abiertamente y lo haya contado con tanta naturalidad ya nos parece una auténtica fantasía.

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