Blake Lively se hace un DIY con sus 'Manolos' y un bote de pintauñas

Tenemos que reconocer que entre las famosas, Blake Lively (34) es un caso muy raro. Y es que, al contrario de lo que suelen hacer sus compañeras de profesión, ella nunca ha recurrido a los servicios de un estilista, es su marido, Ryan Reynolds (45), el encargado de teñirle el pelo y aun así se ha convertido en un verdadero icono de estilo. Por una parte, resulta bastante impresionante que eligiera sin ninguna ayuda los más de 250 modelitos que lució en la gira promocional de la película 'El secreto de Adaline' en 2015, pero por otra, ella le resta importancia a todo el asunto recordando que le llegan a casa un montón de prendas de distintos diseñadores para que se ponga las que prefiera y claro, eso ayuda.

A base de experiencia, la actriz ha aprendido algunos trucos que le permiten salir de más de un apuro. Este martes Blake acudió a un evento de su marca de bebidas Betty Buzz celebrado en el Empire State para el que se enfundó un minivestido rojo de Georges Chakra que combinó con un abrigo de Max Mara y unos Manolo Blahnik del mismo color.

El único problema era que los zapatos estaban adornados con piedras de color blanco que arruinaban el efecto monocromático que, según ella, estaba buscando, así que decidió pintarlas con esmalte de uñas justo antes de salir por la puerta. "Ha merecido la pena, ¿verdad?", ha asegurado en Instagram tras disculparse con la famosa marca de zapatos por haberse atrevido a customizar un par que cuesta 995 dólares.

Por si no lo sabías, la actriz acaba de lanzar su nueva marca de refrescos Betty Buzz y en su momento explicó el conmovedor significado de su nombre. Se trata de unas bebidas refrescantes, sin alcohol y con menos calorías de lo habitual, que sólo contiene ingredientes limpios. "No bebo. Sé que es extraño viniendo de la esposa de un infame bebedor de ginebra", dijo Blake, refiriéndose a la marca Aviation Gin de su marido.

Y continuó: "Durante los últimos años, en los que he tomado refrescos pero no he bebido copas, he visto que los refrescos son los héroes olvidados del mundo de las bebidas y merecen tanto amor como el alcohol. Hemos pasado los últimos tres años elaborando Betty Buzz y estamos muy contentos de que la gente lo pruebe por fin".