Anabel Pantoja y el sexo con Omar Sánchez: ¡se viene bebé!

Ya se sabe, cuando estás lejos de tu pareja, te vienen toda clase de pensamientos a la cabeza, más aún si estás a tomar viento a la farola en una isla desierta. Eso le ha pasado a Omar Sánchez, que ya nota cómo pasan los días en Honduras y echa mucho de menos a su Anabel Pantoja. Pero no solo eso, el novio de la colaboradora de 'Sálvame' está más caliente que las palmeras de la isla, al igual que Anabel, que tampoco se ha cortado en reconocerlo en el plató de Telecinco.

En unas imágenes de Omar con sus compis en la isla, se le escucha cómo habla de sus planes de futuro, que como verás, son muchos. Omar está a tope con la idea de ser padre (y después del circo que montaron con el predictor en 'Sálvame'... Ya no sabemos qué pensar).

"Voy a llegar allí y le voy a decir 'No me quiero separar nunca de ti". Ya lo tengo todo. No necesito nada más. Que termine el concurso y disfrutar de nuestra vida, que es lo más importante", decía Omar sobre Anabel. ¡Pero qué bonito!

"¿No te imaginas un pequeño Omar ahí?", le preguntó entonces Melyssa. "Claro, cogiendo la tabla de surf. Tengo muchas ganas ya y a la vuelta nos pondremos manos a la obra. A la vuelta prepárate Anabel porque viene un mini Omar o una mini Anabel. ¡Exclusiva!". ESTO ES MUY FUERTE.

Está claro que a Omar la isla le pone tierno y Anabel no ha podido evitar emocionarse al escuchar estas palabras de su chico: "Esas cosas nunca me las dice pero ahora sí y desde allí... Y le tengo tan lejos". Una de pañuelos pa' los mocos de Anabel, por favor.

"Pero que yo ahora no voy a tener niños. Ahora nos pondremos a practicar pero tenerlos no. Tengo que hacer muchas cosas, tengo cosas de trabajo y ahora mi vida está entre Canarias y Madrid". Ohhhhh...

Dejando los retoños a un lado, Anabel además ha hablado de cómo es el sexo con Omar, y la verdad, su respuesta nos ha dejado picuetas. Atiende: "A ver... los domingos no. Porque los domingos me ponía a ver mis debates y mis cosas. Omar además se acuesta temprano. Sí que es verdad que él es más ardiente que yo. ¡Él! Ahora a ver cómo viene...". Pues ya te lo decimos nosotras, Anabel: ¡más caliente que el palo un churrero, amiga!