Aitana deja al descubierto lo que nunca le habíamos visto claramente: su frente y sus cejas

Aitana está empezando a disfrutar del veranito y gracias a eso hemos podido ver lo que nunca habíamos visto tan claramente hasta este momento: su frente y sus cejas. Si hay algo que caracteriza la cara de la cantante es el flequillo tan milimétrico que tiene desde que empezó en 'Operación Triunfo 2017'. Pensábamos que ya lo que hubiese debajo del flequillo nunca íbamos a verlo, pero con todos los cambios que está haciendo en su vida... Liberarse del flequillo perfecto ha sido uno de ellos.

Últimamente estamos viendo una nueva Aitana, tanto profesionalmente como personalmente. Esta nueva etapa de la artista nos tiene a todos un poco flipando porque se ha pasado al techno y su nueva canción de 'Las Babys', una nueva versión de 'Saturday Night', lo está rompiendo en todas partes. Con este cambio también ha sacado nuevas performances: sus actuaciones son más espectaculares y hasta la hemos visto besarse con una bailarina en pleno concierto.

La artista está 'open your mind' total y su nueva era está viniendo con muchos éxitos. También hace poco que se ha presentado con un nuevo 'look': podemos ver 'outfits' muchos más atrevidos de los que llevaba hasta el momento y ha decidido dejar su larga melena por el pelo corto. Eso sí, el flequillo no lo abandona, aunque ya no lo lleva cortado al milímetro para no dejar que se vea ni un trocito de frente. Ahora estamos viendo sus ideas más claras, literalmente, porque tiene un flequillo más descuidado que le da un aire más atrevido.

Gracias a esto hemos podido ver lo que nunca pensábamos que veríamos de ella: su frente y sus cejas. Y tal y como esperábamos, le queda genial y no tiene ninguna frente que esconder al mundo. No nos extrañaría si en algún momento decidiese acabar por fin con el flequillo, aunque sea uno de los rasgos más característicos de la artista. Sin duda, esta etapa de cambios le está sentando como un guante.

Aitana sufrió 'bullying'

"Tenía una opinión más natural de todo e intentaba gustar a todo el mundo. Me di cuenta de que es imposible y lo fui tratando. No puedes gustarle a todo el mundo y eso está bien", ha contado. Y es que, Aitana tuvo una época de su infancia en la que sufrió bullying en la escuela de música.

"En mis clases de música sufrí un poco de bullying. He tenido una infancia muy feliz, pero en la escuela de música me pegaban chicles en el pelo", contaba y añadía que: "También decían que tenía piojos para que la gente no se acercara a mí".

Quizás este sea uno de los motivos por los que a la artista le ha costado tanto tiempo dar este cambio radical, pero ni tan mal le está viniendo. ¡Nos encanta la nueva Aitana!