Cristina Pedroche y las Campanadas, en duda tras su reciente maternidad

Cristina Pedroche está muy emocionada ante la idea de volver a presentar las campanadas de Nochevieja, en un 2023 que supondrá el décimo aniversario de su debut en la Puerta del Sol de Madrid. Si todo sale bien, la noche del 31 de diciembre volverá a aparecer en la pequeña pantalla con un vestido que, seguramente, dará mucho que hablar entre los espectadores. Sin embargo, ella misma ha confesado ahora que tiene ciertas dudas al respecto, casi todas relacionadas con su reciente la maternidad.

La presentadora dio a luz a su pequeña Laia, fruto de su matrimonio con el chef Dabiz Muñoz, el pasado 14 de julio. Desde entonces, a la antigua reportera le cuesta mucho separarse de su hija, por lo que no sabe cómo afrontará lo de estar el 31 de diciembre en plena Puerta del Sol. "Por supuesto que voy a estar... Bueno, si no me han echado", ha desvelado a su paso por el programa 'Y ahora Sonsoles'. "¿Pero este año qué? ¿Me llevo a la niña o no me la llevo? Son muchas horas allí, hace mucho frío y me daría pena. Pero si la dejo en casa también me daría pena", ha reflexionado en su entrevista con Sonsoles Ónega.

Al margen de esos dilemas, la presentadora ya está trabajando en el diseño de su estilismo, que sin duda será uno de los platos fuertes de la retransmisión. "Este año es mi año, mi décimo aniversario dando las campanadas. Va a ser muy especial", ha adelantado la colaboradora de 'Zapeando', quien también se ha sincerado sobre el momento tan complicado que vive a nivel emocional desde su estreno como madre.

Buena parte de esos contratiempos están íntimamente ligados a las críticas y crueles comentarios que no ha dejado de recibir en las redes sociales, lo que ha llevado a la presentadora a no compartir fotos de su hija por miedo a que se convierta en una víctima colateral del odio que le envían sus haters.

En cualquier caso, Cristina Pedroche se siente feliz y más enamorada de Dabiz que nunca. Por eso está deseando repetir experiencia lo antes posible. "Tengo nuevos miedos y nuevas emociones. Miro a mi hija y me muero de amor. Es perfecta y ahora quiero tener 8 hijos", ha asegurado.