Rodolfo Sancho se toma como un "reto" el proceso judicial de Daniel Sancho en Tailandia: "No voy a llorar"

Un mes después de que se produjese el terrible crimen en el que Daniel Sanchó asesinó y descuartizó a Edwin Arrieta y tras recibir varias visitas de su madre, Silvia Bronchalo, era ahora su padre el que viajaba hasta Tailandia para seguir el proceso judicial. Rodolfo Sancho se presentaba en la cárcel de Koh Samui por primera vez acompañado de su abogado y al salir recibía a la prensa dejando clara una cosa: no va a llorar.

Rodolfo Sancho acudía a prisión acompañado de el abogado Marcos García Montes y el hijo de este, Marcos García Ortega, y sus primeras palabras con la prensa española eran darle el pésame a la familia de Edwin Arrieta. Luego, muy seguro de que no va a hablar de su vida personal resaltaba que: "No estoy llorando por los suelos...Te lo puedes tomar como una desgracia o como un reto, creo que con eso he dicho suficiente. No van a conseguir lágrimas de mí".

Los reporteros y reporteras que se encuentran en Tailandia insistían en preguntar al actor sobre lo que había hablado con su hijo o cómo ha sido este reencuentro pero él sigue tajante y no piensa dar ningún dato sobre sus encuentros privados. Sí, se ha enfadado.

Según ha comentado el abogado encargado de defender a Daniel Sancho, Rodolfo se quedará en la isla hasta este sábado 9 de septiembre a la espera de la otra fecha importante tanto para él como para su exmujer. Y es que, el 30 de septiembre es el día marcado en el calendario para que Daniel pueda tener un vis a vis con sus padres pero todo depende de su buen comportamiento en prisión.

En este encuentro Daniel podrá estar con sus padres físicamente e incluso comer juntos si se lo permiten algo que les ayudará a acercar posturas de cara al proceso judicial.

La reconstrucción del asesinato de Edwin Arreita paso a paso

En la confesión, lo primero que ha destacado Daniel Sancho ha sido la discusión que tuvieron en la habitación porque supuestamente Edwin quería practicar sexo con él y este se había negado. A tanto llegó la cosa que decidió propinarle un puñetazo que lo dejó K.O. Los agentes incluso le han quitado las esposas para que este haga todos los movimientos con la mayor precisión posible.

Luego, con Edwin en el suelo del baño, Sancho lo alzó y le dió contra el quicio del lavabo, donde creyó que definitivamente le había matado. En este momento, el policía que simula a Edwin dice entre risas que Daniel "tiene mucha fuerza". ¡OMG! Posiblemente uno de los momentos más incómodos de la confesión.

Asegura que estuvo en 'shock' tras este golpe y decidió llevar el cuerpo hasta la bañera. A todo esto, el policía se ve abrumado y Daniel acaba pidiendo perdón porque le coge de las piernas para arrastrarlo tal y como hizo con Edwin. En este momento, el cachondeito entre todos los agentes es máximo... No paran de reírse.

Daniel Sancho asegura que le echó agua caliente para que la sangre no se coagulase. Fue a por bolsas, la sierra y el machete para empezar a desmembrar el cuerpo. ¡Y lo más fuerte de todo! La policía le ofrece un cuchillo para sumilar lo ocurrido, a lo que él responde tajantemente y con cara de pocos amigos:"¿Es necesario?", por lo que deciden no dárselo.