Nuevo 'shippeo' en MasterChef Celebrity... O sea

Los concursantes de 'MasterChef Celebrity 4' han comenzado la noche enfrentándose con nada menos que 58 variedades de cítricos entre los que, además de la típica naranja y limón, pudimos ver al limequat, la bergamota, el kumquat o la mano de Buda y todo con Mario Vaquerizo, finalista de la edición anterior, como asesor de una noche con risas, ligues y hasta un calvo en directo.

La gala ha sido tan de lo más divertida y emotiva, con grandes invitados y una visita que les ha tocado el corazón. Han ido al Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo, donde han cocinado un menú de cuatro platos diseñado por Carlos Maldonado, ganador de ‘MasterChef 3’ y dueño del restaurante Raíces. Anabel Alonso, además de dirigir como solo ella sabe en la cocina, donó sus 4.000€ a la fundación del hospital cuya misión es buscar nuevos tratamientos.

La bronca de la noche la ha recibido Vicky Martín Berrocal, que puede que haber estado todo el programa de luto y con mantilla (en honor a 'Los Chunguitos'), parece que le afectó sus facultades culinarias y Jordi Cruz le ha puesto las pilas: “Tienes dos oportunidades más o te irás a la calle”.

A medio programa a Pepe lo ha poseído 'Paquita Salas' y le ha entrado un antojo de torreznos tal, que les ha hecho preparar unas raciones, eso sí, con rollito, prueba de la que Ana Millán ha sido la campeona torreznera ante su propio asombro.

Por cierto, te decimos desde ya que somos fans de Ana y ya hemos adoptado su última frase como mantra: "Que está esto tan sucio que parece la barriga de un poni".

Atiende, amiga que si pensabas que con la tensión sexual entre Boris y Félix teníamos bastante, hay un nuevo 'shippeo' a la vista: el de Jordi con Tamara Falcó, como lo lees. No sabemos qué pensará la Preysler de este tonteo, pero el chef se ha ofrecido para darle unas clases particulares a la más pija de España, eso sí, sin la presencia de su mami. ¿Tendrán Ferrero Rocher de postre?

El expulsado de la noche ha sido Alex Adorver que no ha logrado superar la prueba con el ave que le ha tocado cocinar y vuelve a casa con su peque y a hacerle la comidita a su mujer Patricia Montero. Aunque el cierre lo ha puesto el culo de Yolanda Ramosque nos ha hecho un calvo y se ha quedado más ancha que larga. ¡Venga, hasta luego!