Manual de uso: correctores de colores

Muchas veces después de tirarte horas delante del espejo, te hacen una foto y llega el momento de la verdad. Cuando la ves y compruebas que vas hecha un cuadro; aunque pensabas que ibas perfecta en la imagen ves unas ronchas blancas debajo de los ojos, brillos y ese granito que te habías cubierto, más destacado que si no hubieras hecho nada.

Pero tranquila, esperamos que tras leer este reportaje no te vuelva a pasar. 

Lo primero de todo: tenemos que distinguir entre 'concealer' y corrector, que no son lo mismo. Por un lado están los 'concealers', cuya única misión es ayudar a unificar el maquillaje. El corrector, por su parte, sirve para corregir el color o las imperfecciones de la piel. Existen de muchos colores y cada uno de ellos se usa para tapar diferentes cosas.

Ahí sí que hay miga.

Estos cuatro son los más comunes y sus usos especiales:

- Beige con un tono anaranjado. Perfecto para usar con las tonalidades azules de tu piel. Es decir, esa zona de la ojera más marcada o venitas de esta tonalidad que tengas por la cara.

- Verde. Conseguirás que las rojeces de tu piel, como los granitos o los alrededores de la nariz, queden completamente disimuladas. Si tienes alguna mancha perenne en la piel de la cara también lo puedes usar si lo difuminas muy bien.

- Amarillo. Con este corrector disimularás las tonalidades moradas de tu cara. Si tienes ojeras que tienden al morado, el amarillo será tu aliado.

- Beige con un tono más rosita. También sirve para las ojeras.

Otros colores menos comunes de corrector son el violeta y el azul. El primero se usa para granitos o imperfecciones en color marrón o amarillo, mientras que el azul ayudaa a neutralizar las imperfecciones en tonos naranjas de tu piel. 

A la hora de elegir el corrector no hay que cometer el error de coger un tono mucho más claro que nuestro tono de piel ya que conseguiremos el efecto contrario.

Uno de los sitios en los que más usamos el corrector es para disimular las ojeras. Por si hay dudas, la forma correcta de utilizarlo sería ésta:

Los correctores se pueden poner tanto antes como después de la base de maquillaje, pero siempre repite esta norma: al aplicártelos tienes que difuminarlos muy bien para que no se noten. Lo ideal es que se usen diferentes brochas...

¡Y lista!