Especial YOTELE

'Motivos personales' cumple 20 años: descubrimos los secretos de la serie convertida en fenómeno que revolucionó la televisión

Lydia Bosch y Marta Calvó fueron las protagonistas de esta ficción de misterio que se ha convertido en una serie de culto con el paso de los años.

Lydia Bosch y Marta Calvó, protagonistas de 'Motivos personales'

Lydia Bosch y Marta Calvó, protagonistas de 'Motivos personales' / Telecinco

Carlos Merenciano

Carlos Merenciano

Por qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

En 2005, Telecinco atravesaba una de sus mejores épocas. Se había consolidado como la cadena líder en España gracias a un modelo basado en realities como 'Gran hermano' y 'Operación triunfo' (tras su paso por TVE), además de ficciones de gran éxito como 'Los Serrano', 'Hospital Central' y 'El comisario'. Su programación era un reflejo de lo que el público buscaba en la época: entretenimiento ligero, comedias familiares y dramas accesibles.

Sin embargo, en un intento de diversificar su oferta y atraer a una audiencia más adulta, Telecinco apostó por un género inexplorado en la televisión española: el thriller. Así nació 'Motivos personales', un proyecto ambicioso que se convertiría en un fenómeno televisivo y dejaría una huella imborrable en la ficción nacional. Creada por Javier Holgado y Carlos Vila, esta nueva ficción estaba producida por Ida y Vuelta.

El regreso de Lydia Bosch a la televisión tras cuatro años de descanso

El proyecto marcó el regreso de Lydia Bosch, una de las actrices más queridas por el público, tras cuatro años alejada de la televisión. Su último gran trabajo había sido 'Dime que me quieres' (2001) en Antena 3, y después se retiró para centrarse en su vida familiar. Su retorno no solo era esperado, sino que Telecinco lo convirtió en un evento: diseñó una serie a su medida, con un personaje fuerte y enigmático, muy diferente a los roles que había interpretado en el pasado.

En 'Motivos personales', Bosch dio vida a Natalia Nadal, una periodista que se veía envuelta en una trama de asesinatos, conspiraciones y oscuros secretos familiares. Su personaje era el motor de la historia, enfrentándose a una red de corrupción que afectaba a los personajes más poderosos de la serie, interpretados por grandes actores como Fernando Guillén o Concha Velasco.

Virginia Palazón, el personaje que pudo tener a otra actriz

Si 'Motivos personales' tuvo un personaje que dejó una huella imborrable, ese fue Virginia Palazón, la gran antagonista interpretada por Marta Calvó. La actriz, conocida en Cataluña por su trabajo en TV3, fue la apuesta de la productora para el papel, aunque Telecinco inicialmente dudaba sobre su elección: querían que fuera interpretado por Natalia Millán. Finalmente, Calvó se quedó con el personaje y demostró que era una gran opción.

Virginia Palazón era una villana diferente a las que se habían visto hasta entonces en la ficción española. Su frialdad, su capacidad de manipulación y su carisma hicieron que el público se sintiera fascinado por ella. La clave de su éxito radicó en la ambigüedad del personaje: a pesar de sus actos despiadados, mantenía una imagen pública impecable, engañando tanto a los personajes como a la audiencia.

Interpretar a Virginia no fue fácil para Marta Calvó, quien en entrevistas ha reconocido que el doble juego emocional del personaje le supuso un reto constante. Sin embargo, su actuación fue aplaudida por la crítica y se convirtió en una de las villanas más icónicas de la televisión española.

Un thriller pionero en la televisión española

En los primeros años de los 2000, la ficción nacional estaba dominada por comedias familiares ('Aquí no hay quien viva', 'Los Serrano'), dramas médicos ('Hospital Central') y series costumbristas ('Cuéntame cómo pasó'). En aquel momento no existía una producción nacional que apostara por el thriller como género principal.

'Motivos personales' rompió esa barrera. Se convirtió en la primera serie de thriller producida en España, apostando por una narrativa llena de giros inesperados, secretos y un suspense digno de las grandes series internacionales. Hasta entonces, el público español había visto thrillers extranjeros como 'Twin Peaks', pero nunca una producción propia que se atreviera a explorar el género con tanta ambición. El formato era arriesgado no solo por su historia, sino también por su realización técnica, que exigía una planificación minuciosa para mantener la tensión episodio tras episodio.

El misterio del asesino, también para los actores

Uno de los grandes aciertos de la serie fue cómo manejó el misterio en torno a la identidad del asesino durante la primera temporada. Para mantener el suspense, los creadores decidieron no revelar al elenco quién era el culpable, de manera que los actores interpretaran sus papeles sin saber si eran ellos mismos los responsables de los crímenes. Solo dos personas conocían la verdad desde el principio: Lydia Bosch y Marta Calvó.

Esta estrategia no solo aumentó el realismo de las interpretaciones, sino que generó debates y teorías entre los propios actores durante el rodaje. El resultado fue un final de temporada que dejó a la audiencia sin aliento: Virginia Palazón era la asesina. El episodio final fue un éxito rotundo, con más de 6,2 millones de espectadores y un impresionante 36,4% de share.

Miguel Ángel Silvestre y Álex González: dos actores para un mismo personaje

Uno de los momentos más curiosos de la serie ocurrió con el personaje de Nacho, quien inicialmente fue interpretado por Miguel Ángel Silvestre. Sin embargo, tras la primera temporada, el actor decidió abandonar la serie por otros compromisos profesionales.

Para sustituirlo, Telecinco recurrió a Álex González, quien originalmente había rechazado el papel para rodar una película. Este cambio fue justificado en la segunda temporada con un episodio especial en el que se regrabaron escenas clave de la primera temporada con González en el papel de Nacho. Este recurso permitió una transición más fluida, aunque dejó una curiosidad para los fans: algunas escenas podían verse con ambos actores interpretando los mismos diálogos.

La tercera temporada que nunca llegó

A pesar del éxito de la segunda temporada, Telecinco decidió cancelar la serie con un final abierto. Sin embargo, los guionistas ya habían comenzado a trabajar en una tercera entrega.

Esta nueva temporada habría comenzado con un salto temporal de varios años y un impactante giro: Nacho moría en su propia boda debido a una bomba. Este evento habría unido a Natalia y Virginia en una alianza inesperada para encontrar al asesino. Además, se había planeado que el personaje de Lydia Bosch sufriera una ceguera temporal, lo que habría supuesto un gran desafío para la actriz, quien ya había comenzado a prepararse en la ONCE para interpretar el rol de forma realista.

El legado de una serie icónica

Aunque 'Motivos personales' terminó abruptamente, su impacto en la televisión española fue innegable. Su éxito inspiró a otras producciones como 'Círculo Rojo' en Antena 3, aunque ninguna logró replicar su fórmula de éxito de su predecesora.

En 2015, la cadena estadounidense ABC, en colaboración con la productora de Ellen Pompeo ('Anatomía de Grey'), intentó adaptar la serie bajo el título 'Personal Motives', pero el proyecto nunca vio la luz.

Actualmente, la serie sigue disponible en plataformas como Netflix y Prime Video, lo que ha permitido que nuevas generaciones descubran su intrigante historia.