Máxim Huerta (Benidorm Fest): "España ha entrado en el mapa de Eurovisión"

La primera edición del Benidorm Fest llega a su clímax con la celebración de su gran final, gala en la que conoceremos al artista que representará a España en Eurovisión 2022. Junto a Alaska y Inés Hernand, Máximo Huerta ha sido uno de los presentadores de esta preselección de TVE, que ya ha hecho historia al conseguir un importante éxito en audiencias televisivas y en repercusión social.

Después de un intenso año televisivo en Á Punt, cadena en la que actualmente presenta 'Bona Vesprada', el periodista y escritor cumplió 51 años el día que presentó la primera semifinal de la competición musical, algo, que según afirma, le parece "un regalo del destino". YOTELE habla con Máximo Huerta sobre la celebración del 'Benidorm Fest 2022', entre otros asuntos.

Has celebrado tu cumpleaños en plena primera edición del Benidorm Fest.

Nunca en la vida me lo hubiera imaginado esto, y mira que me han pasado muchas cosas de todo tipo. No sé quién es el guionista que hace el guion de mi vida pero esto ha sido una cereza/guinda a una década que cierro y a otra que abro, y me parece maravilloso. Siempre he soñado con presentar Eurovisión y esto es ya como la primera entrada. Esto me parece un regalo del destino.

¿Qué le has pedido como regalo de cumpleaños al Benidorm Fest?

En clave eurovisiva le pido que me regalen la canción que nos representará y que hará que gane España. Quiero ese regalo.

¿Tienes alguna canción favorita para representar a España?

Tengo varias favoritas. No diré ninguna por respeto a los artistas, pero es un año en el que tengo varias. Y alguna que ha entrado en lista cuando la o lo he visto actuar.

Las galas han tenido una duración bastante corta respecto a otros formatos de preselección que ha tenido RTVE.

A mí eso me parece genial como espectador y profesional del medio. Las actuaciones, quince minutos de votación en los que hay actuaciones y todo muy picadito como decimos en televisión.

Tampoco habéis tenido un guión cerrado en las galas.

El hecho de que no haya cue ya implica que no está cerrado. Cuando lo hay implica que te ajustas a todo lo que va marcando. Hemos podido jugar. De hecho, nos hemos vistos obligado a jugar de alguna manera porque no hay texto fijo. No es un Padre Nuestro. Hay freestyle como diría un rapero.

Te hemos visto muy cómodo con Alaska y Inés Hernand en las labores de presentación. ¿Cómo habéis preparado las galas?

Como Alaska y yo nos conocemos tanto, con una mirada ya sabemos cuándo habla uno y calla el otro. A Inés la he conocido por verla en sus mundos de Instagram, de los que yo quedo muy lejos por generación, pero la considero una diosa y la admiro.

¿Recuerdas esa llamada para proponerte presentar el Benidorm Fest? ¿Qué sentiste? ¿Cómo reaccionaste?

Me llaman en directo mientras estoy presentando el programa ('Bona Vesprada' en À Punt). Era un teléfono desconocido: 'Soy de TVE, dime cuándo podemos hablar'. No me imaginaba que era del Benidorm Fest. Según salí del programa, en el coche, me llamó Ana Bordas (Directora de Originales de RTVE) para preguntarme si quería presentarlo. Y dije que sí. Me respondió: 'Pero espera, que quiero plantearte más cosas'. Y yo, "Sí, sí, sí. Cuándo sea, dónde sea y cómo sea" (ríe).

¿Esto te lleva a pensar un punto de inflexión... o en un regreso a TVE?

Estoy trabajando en televisión valenciana y soy muy respetuoso con el trabajo donde estoy. Estoy viviendo a tope. No te puedes imaginar el callo que he hecho este año volviendo a la autonómica. Ha cambiado mucho. Hacía veinte años que no presentaba en la autonómica, y hacer cuatro horas diarias en esa franja... Además, he hecho de actor en una serie, he hecho las Campanadas, las galas, la Cremá... Creo que es el año más potente televisivamente de mi vida.

¿Cómo es la vida fuera de la M-30?

España va más allá. Creemos que todo pasa en Madrid, y no todo pasa en allí. Fuera hay un montón de vida, de canciones y de idiomas, un montón de asuntos que parecen menores para los de Madrid. Filomena no solo pasó por Madrid. España es súper variada, como se puede ver en el festival.

¿Te ha costado adaptarte al ritmo?

Sí. He vuelto a mi casa, no cabía en la cama de siempre... He vuelto a encontrarme con mis redacciones, me he encontrado a mis amigos del pueblo, he vuelto al idioma que hacía tiempo que no hablaba, he vuelto a vivir con mi madre, he vuelto a estar cuidarla... Todo lo que me ha pasado ahora, cuando cambias de lugar, de cama, de compañía, de hasta el idioma, ha sido un shock personal y profesional, ha sido inspirador. Estoy muy relajado, más relajado que nunca en mi vida. Ojalá ahora empezar a hacer televisión. Ojalá ahora con la sensación que tengo, que me da la tranquilidad, empezara a hacer televisión. Como lo hacía mal cuando estaba con Ana Rosa, ni cuando presentaba informativos, o en 'Destinos de película'... Todo lo que he hecho hasta ahora lo habría disfrutado tanto con la sensación que tengo hoy... Y se me nota.

Volviendo al tema Eurovisión, ¿has llorado alguna vez en alguna noche eurovisiva?

Lloré una noche eurovisiva muy fuerte porque había un flashmob, no sé qué de país era, pero fue el mejor flashmob mundial en 2010, que se hacía por toda Europa. De pronto, estoy mirando y salió mi madre. ¡Mi madre me ha superado en audiencias, mi madre! Tiene que ganar España para que supere a mi madre. Ya podéis poner de vuestra parte (ríe).

Mi madre estaba en el flashmob y yo, viendo la tele en una casa rural con 20 amigos. La llamé y dije: '¡Pero mamá!”. Me dijo: 'Ah, sí, me pillaron en la playa, con el perro, me pidieron bailar para una cosa que no sé qué es, de Eurovisión, y lo he hecho'. Así que mi madre ha tenido más audiencia que yo, ¡pero sumando toda mi carrera! Se grabó en L'Alfàs del Pi y sale con el perro. ¡El perro también me ha superado! Imagínate cómo te quedarías al ver a tu madre...

¿Recuerdas tu primer recuerdo eurovisivo?

Tengo que echar la vista muy atrás. Tengo ese momento de 'Lady, Lady', de Bravo, que me recuerda a ir por la calle cantando. Y también el Made in Spain, de La Década Prodigiosa, que me pilló en París.

Inés Hernand dijo en la rueda de prensa que tenía el titulo de eurofán básico de curriculum. Para saber si tienes el C2 del carnet del eurofán, ¿eres de los que organiza fiestas para ver Eurovisión y se ve las preselecciones de otro países?

Sí. Yo soy de los que aman San Remo, el Melfest (Melodifestivalen), y me gustaría que esto se convirtiera en eso. Esta es la ciudad perfecta para que dos semanas al año, en un momento del año que no es temporada alta, se convierta en un Melfest lleno de eurofans de toda Europa. La palabra ya la tienes. Y creo que han acertado y creo que se va a convertir en un Melfest cálido.

¿Qué canción de Eurovisión no falta en tus listas de reproducción? ¿Cuál es la canción eurovisiva que te define?

Soy muy de Nina y 'Nacida para amar'. Y de hecho la canto. Creo que esa canción, que es la única vez que se ha levantado la orquesta a aplaudir a un participante. Me define.

Para los escépticos y no eurofans, ¿vamos a ver a España volver a ganar?

Yo creo que Europa ha empezado a mirar. He hablado con gente de Eurovisión en Italia, y han dicho que todos han empezado a mirar a España. Es frase textual: España acaba de entrar en el mapa de Eurovisión. Se juntan muchas cosas: el azar, Benidorm, que es una mini-Europa y todo el mundo dice 'ah, que están haciendo aquí', y el volver a revitalizar con canciones abiertas. Lo que hay este año es ilusión. La ilusión, como el sexo, es contagiosa.

Respecto a los resultados que se obtengan en Eurovisión, ¿crees que puede dudarse a corto plazo de la propuesta del festival si no hay una buena posición en mayo en Turín?

El Benidorm Fest es algo bueno y en lo que creo. Estoy convencido que para el año que viene muchos que ahora dudaron, sé perfectamente que hay grandes artistas, habrán dicho: 'Joder, en una semana han sonado las canciones de 14 personas de una manera brutal'. ¿Cuándo colocas una canción que suene, que guste y que tenga ya admiradores? Es muy difícil. Lo que se ha conseguido lo están deseando ya nuevos candidatos.

Telecinco incluso ha cogido 'Ay, Mamá', la canción de Rigoberta Bandini, para sus promos de Rocío Carrasco o en 'Sálvame'...

Lo de Telecinco es muy fuerte (risas). Son expertos y magos de la televisión, es innegable, y saben aprovechar. Telecinco es un bar y sabe de perfectamente qué se habla en el bar. ¿De la subida de la luz? Pues se habla. ¿Se habla de Eurovisión? Pues nosotros también.

¿Qué futuro le auguras al Benidorm Fest?

El Benidorm Fest ha venido para quedarse. Este año es diferente por el Covid, pero ¿te imaginas esto sin Covid? Entradas, pantallas, calles, fiestas... Imagina esto que vivimos ahora pero sin Covid.