Especulación

El arquitecto Pablo Borraz explica uno de los grandes problemas de la vivienda: "Hemos confundido precio con valor"

"Vivimos en una sociedad que construye para vender, no para vivir"

Vivir bien en Barcelona: el sueldo que necesitas para pagar la vivienda y llegar a final de mes

Pablo Borraz, arquitecto: "Una casa cómoda no es la más grande, sino la más inteligente"

Jóvenes miran ofertas de alquiler en el escaparate de una oficina inmobiliaria, en Santiago de Compostela. / EFE/ Xoán Rey

Jóvenes miran ofertas de alquiler en el escaparate de una oficina inmobiliaria, en Santiago de Compostela. / EFE/ Xoán Rey

Pedro Sanjuán

Por qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Hace varios años que el acceso a la vivienda se ha convertido en la principal preocupación de la sociedad actual. Los precios para comprar un piso o una casa se han multiplicado en la última década, provocando que para la mayoría de jóvenes sea prácticamente imposible convertirse en propietarios.

"Vivimos en una sociedad que construye para vender, no para vivir. Donde la arquitectura debería darle forma a la vida humana, pero acaba convertida en un producto más para alimentar a la bestia de la especulación", ha reflexionado el arquitecto Pablo Borraz en Instagram. "Si seguimos levantando espacios donde nadie quiere quedarse, donde nadie saluda al vecino, donde habitar es solo dormir para ir a trabajar al día siguiente… estamos perdiendo mucho más que edificios: estamos perdiéndonos a nosotros mismos", ha asegurado.

El arquitecto explica que los edificios están "pensados para amontonar personas, no para crear comunidad" y que hay muchos "barrios donde nadie se saluda, donde nadie quiere quedarse". Con esta manera de construir, la luz y la calma quedan relegados "para hacer sitio al metro cuadrado más barato y al beneficio más rápido posible".

"Una sociedad que solo sabe construir para vender"

"Hemos confundido precio con valor, éxito con acumulación, habitar con simplemente dormir bajo un techo", ha recordado en un vídeo. "Y así vamos, levantando un presente donde nadie quiere estar, donde nadie llega nunca a sentirse como en casa. Si no cambiamos esta manera de pensar, seguiremos construyendo un futuro donde la vida no cabe", ha afirmado.

"Una sociedad que solo sabe construir para vender, acaba perdiendo mucho más que simplemente edificios. Acaba perdiéndose a sí misma", ha finalizado en una publicación en la que reflexiona sobre cómo ha cambiado la arquitectura.