La mesa de reindustrialización de Mahle se prorroga un mes, con cuatro ofertas para Vilanova i la Geltrú

La mesa para reindustrializar las antiguas fábricas de Mahle en Vilanova i la Geltrú se alargará hasta abril. El órgano se tenía que disolver este viernes, según el acuerdo a que llegaron las partes cuando la empresa cerró en enero de 2022. Con todo, el interés real de hasta cuatro inversores ha forzado una prórroga. Según ha detallado este jueves el gobierno de Vilanova, hay tres empresas interesadas en una de las dos naves y una cuarta compañía con voluntad de instalarse en el otro espacio. No ha transcendido a qué sector pertenecen. El Ayuntamiento ha asegurado que ofrece “máximas facilidades” a los inversores para materializar la reindustrialización, mientras continúa la negociación por el desarrollo urbanístico del entorno de las instalaciones.

“Las ofertas están, y las posibilidades de reindustrializar Mahle, también”, ha asegurado la concejal de Empresa, Conxi Martínez, recalcando las “facilidades” predispuestas desde el Ayuntamiento y la Generalitat. Martínez ha afirmado que “no dejará de venir ninguna empresa por motivos administrativos”, en relación a los convenios urbanísticos que hay ligados al futuro de las naves. Y es que la última fábrica que Mahle cerró está asociada a un antiguo compromiso de desarrollar el entorno, puesto que el polígono no cumple los requerimientos mínimos.

Martínez y el concejal de Urbanismo, Xavier Serra, han explicado que el compromiso urbanístico lo adquirió Mahle décadas atrás, de forma que es la multinacional alemana quien ahora tendrá que negociar con los inversores qué carga de este desarrollo asume cada una de las partes. “El gran reto ahora está en manos de Mahle”, han resaltado.

Interés en las antiguas fábricas

Si bien no han transcendido cuáles son las cuatro empresas interesadas en las antiguas fábricas de componentes para la automoción, Serra ha apuntado que no se trata de compañías vinculadas al mundo de la logística. En este sentido, el concejal ha indicado que el gobierno no es partidario de apostar por este sector “porque comportaría una movilidad mucho más elevada y esto requeriría de un plan urbanístico muy complejo. Apostamos por una solución más blanda”.

Según han anunciado los concejales, esta semana se ha celebrado la última reunión de la mesa de reindustrialización y la previsión es hacer un último encuentro “definitivo” el mes que viene, durante el cual las administraciones, los sindicatos y las empresas verán si hay o no acuerdo. Mientras, los inversores se reunirán con los directivos financieros de Mahle para ver si es posible acercar posiciones y dar un nuevo futuro a las plantas, de donde fueron despedidos más de 340 trabajadores ahora hace un año.

Una nueva multinacional en Vilanova

Por otro lado, Serra y Martínez han avanzado este jueves la inminente llegada de una empresa multinacional que se instalará en la ciudad. Han apuntado que se trata de una firma actualmente ubicada en el área metropolitana “con voluntad de trasladarse para poderse expandir”. Han declinado dar detalles por motivos de confidencialidad, de forma que no ha transcendido ni el nombre, ni el sector, ni la cantidad de puestos de trabajo que podría generar. Serra sólo ha dicho que la previsión es que entre en funcionamiento en 2024.

Más suelo industrial y descalificación del Ortoll

Los concejales han hablado del futuro industrial de la ciudad en el marco de la presentación de una diagnosis de la actividad empresarial en los polígonos de VIlanova i la Geltrú. El estudio constata que hay varias empresas en la ciudad con intención de ampliar su actividad, motivo por el cual el Ayuntamiento trabaja en recalificar 40 hectáreas para destinarlas a usos industriales. Se trata de un área situada en el polígono Masia d'en Notari, al oeste de la C-15. Serra ha dicho que la Dirección General de Urbanismo ya ha dado el visto bueno a esta expansión, que se tendrá que aprobar a través del pleno municipal durante el próximo mandato. Según el concejal, la previsión es que las nuevas 40 hectáreas se urbanicen progresivamente a medida que se acuerde la implantación de empresas.

Ligado a este crecimiento industrial, el concejal ha avanzado que prevén hacer una compensación recalificando terrenos que ahora son urbanizables para preservarlos medioambientalmente. Serra ha explicado que, previsiblemente, esta descalificación se hará en el espacio del Ortoll, al lado de la playa, pero ha evitado dar alguna concreción más.

En cuanto a la diagnosis de los polígonos, el estudio ha analizado las 12 áreas de actividad que hay en la ciudad, que acogen 426 empresas. Según los autores, en ellas trabaja un 16% de la población de Vilanova. Entre los principales retos a afrontar a corto plazo, sitúan la necesidad de interrelacionar las empresas, crear proyectos mancomunados, apostar por la transición energética y resolver los déficits en inversiones. “Hay que humanizar más estos espacios”, señalan los autores.

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