Serigrafía

MÍRIAM LÁZARO

Son mujeres, migrantes, pobres y rebeldes. Son también jóvenes y especialistas en hacer añicos prejuicios y etiquetas. Iman, vecina de la Ribera desde los 12 años, hace ocho, cuando abandonó junto a su familia su Tánger natal, reivindica convencida su feminismo bajo su velo, al que no piensa renunciar. Iliana, a sus 19 años, es la única chica negra, migrante, de su clase de la facultad en la que estudia Ingeniería. Es también amiga y vecina de Iman, con quien ha compartido largas tardes de adolescencia en el barrio. Las escucha orgullosa Rosa, madre de la iniciativa y activista del Espacio del Inmigrante.