Cuatro muertos en incendio plaza de Tetuán

El horror ocurrió tras una persiana cerrada. Una como tantas. Un bebé, un niño de tres años y sus padres, migrantes dedicados a la chatarra, murieron en un local ocupado en el que malvivían. Más allá de las causas exactas que provocaron el incendio, es evidente que murieron víctimas de una injusticia social insoportable. De un sistema que niega a demasiados el acceso a un trabajo digno, que convierte el derecho a la vivienda en un lujo inaccesible y que impone unos costes energéticos de locura.