Pere Aragonès, interviene durante el congreso de ERC, en la Fira de Lleida

Si había dudas sobre si la rendición de ERC al PSC, a cuenta de la B-40, el jueves le pasaría factura a Pere Aragonès, en el congreso del partido de este sábado, estas se desvanecieron a los 15 minutos de empezar el cónclave. La subida al escenario del ‘president’ fue recibida por una larga salva de aplausos y aclamaciones por los más de 1.400 delegados presentes en la Fira de Lleida. Se cumplían así las previsiones de la dirección que apostaban por que la militancia entendería que se había cedido en la autovía para tratar de conseguir un “bien superior”: los presupuestos.