La ruptura con Errejon deja a podemos sumido en la incertidumbre
Podemos vive una de las mayores crisis internas desde su fundación. Los dirigentes Pablo Iglesias e Iñigo Errejón están consumando su divorcio político después de años de tiras y aflojas sonoros, aunque ninguno de los dos quiera asumir públicamente la responsabilidad de la ruptura que se augura total y sin marcha atrás después de las elecciones de mayo. Hasta entonces, Errejón, que ha dejado a un lado las siglas de Podemos para anunciar que se presentará a las autonómicas bajo la marca electoral de Manuela Carmena, insiste en que es posible cuadrar el círculo, que él no abandonará su partido y que es posible llegar a un acuerdo para elaborar una gran candidatura conjunta progresista tal y como él plantea. Pero la cúpula morada ha asumido su iniciativa como una traición imperdonable y, aunque no quiere echarle (de momento) por estrategia, parecen dispuestos a animarle a decir adiós con ataques verbales severos dirigidos a su compañero.