Josep María Fonalleras publica su primer libro de poemas,'L'estiuejant'

JORDI COTRINA

“'La tristesa es transforma en una eina / per treballar, com ho són per al fuster / una barrina, un martell / un ribot, una serra'”. La tristeza sobrevenida es la herramienta (más cincel o cepillo que rascan y pulen que barrena o serrucho que rasgan y perforan) que ha utilizado Josep Maria Fonalleras (Girona, 1959) para convertir en poemas las escenas vividas o observadas que agrupa en su primer libro de poesía, ‘L’estiuejant’ (Edicions Vitel·la). A menudo son momentos felices, o de éxtasis estético. Fulgurantes (puede ser una breve iluminación, pero también rayo que fulmina). Porque la tristeza viene después, cuando el poeta constata que el pasado ha quedado atrás, ha llegado el abandono o la ruptura o el equilibrio está a punto de quebrarse.