Policías de Estados Unidos dispersan a los inmigrantes con gas lacrimógeno en Tijuana

DAVID GUZMÁN (EFE)

La compleja y tensa situación que se vive en Tijuana, la localidad mexicana fronteriza a la que en las últimas semanas han llegado varios miles de migrantes centroamericanos que aspiran a pedir asilo en Estados Unidos, ha escalado este domingo. Una jornada que empezó con una manifestación pacífica de cerca de mil migrantes evolucionó hacia el caos. Hubo choques con la policía mexicana y disparos de gases lacrimógenos y otros proyectiles desde EEUU. El Departamento de Seguridad Nacional estadounidense decidió cerrar por unas horas todo el tráfico rodado y a pie legal por San Ysidro, el punto más transitado en toda la frontera entre EEUU y México.