La sucesora de Merkel al frente de los conservadores no concurrirá a la Cancillería

HANNIBAL HANSCHKE / REUTERS / VÍDEO: EFE

Un año y dos meses. Es lo que ha durado la esperanza de que Annegret Kramp-Karrenbauer pudiera suceder a Angela Merkel al frente de Alemania. Es el tiempo transcurrido entre el congreso en el que AKK (acrónimo con el que popularmente se conoce Kramp-Karrenbauer) fue elegida presidenta de la CDU y su anuncio de este lunes de que renuncia a presentar su candidatura a la cancillería y que pretende abandonar la dirección del partido democristiano.