Colocación de vallas para cortar el tráfico en el lateral de la Diagonal con el paseo de Sant Joan, en Barcelona

FOTO Y VÍDEO: MIQUEL CODOLAR / ACN

Los barceloneses, dice un amigo mío, somos timoratos a la hora de salir de nuestro propio barrio. El covid nos ha quitado la opción de alejarnos de casa, y a la que hemos podido irnos moviendo hemos encontrado una ciudad muy distinta a la de antes de la pandemia. Con menos coches y turistas, sin poder ir despistados para no chocar, nuestra mirada es más corta. Nos revela imágenes que no habíamos sabido mirar, a base de tanto verlas. Algunas, como las colas del hambre, son terribles. Pero también recupera otras más bellas, de fachadas y lugares.