Psicología

La psiquiatra Marian Rojas, sobre las relaciones nocivas: "Puede ser el germen de enfermedades físicas y mentales"

Marian Rojas Estapé, psiquiatra: "Todos tenemos a alguien que nos sube el cortisol"

La psiquiatra Marian Rojas Estapé, sobre las adicciones: "No son viciosos, son víctimas"

La psiquiatra Marian Rojas Estapé

La psiquiatra Marian Rojas Estapé / @marianrojasestape

Lola Gutiérrez

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En algún momento de la vida, todos hemos tenido cerca a alguien cuya presencia, lejos de sumar, resta. Las relaciones nocivas —ya sean de pareja, amistad, familiares o laborales— pueden drenar nuestra energía, afectar nuestro bienestar emocional y frenar nuestro crecimiento personal. Pero ¿cómo identificar a esas personas que no aportan nada positivo? ¿Y por qué es tan importante aprender a poner límites o alejarnos de ellas?

La psiquiatra Marian Rojas Estapé, con más de cuatro millones de seguidores en Instagram, ha querido responder a estas preguntas en sus redes sociales. "Algunas personas causan felicidad ahí donde caminan, otras la proporcionan cuando se van", decía el escritor Oscar Wilde, frase que ha recuperado la psiquiatra para ilustrar su reflexión.

Personas que nos hacen dudar de nuestro valor

"A lo largo de la vida nos cruzamos con personas que nos suman, que nos inspiran y que nos impulsan a sacar nuestra mejor versión. Pero también con otras que, poco a poco, nos apagan, nos desgastan y nos hacen dudar de nuestro propio valor", introduce Rojas Estapé. En más de una ocasión ha hablado sobre las personas tóxicas, "aquellas que nos suben el cortisol".

No siempre es fácil reconocer que alguien nos está desgastando. Menos aún aprender a dejar ir a estar personas. Hacerlo "es un acto de madurez, de cuidado personal y de amor propio". "No siempre es fácil. A veces cuesta identificar ese malestar. Cuesta aún más aceptar que viene precisamente de alguien cercano", asegura la profesional.

También es importante saber diferenciar: "Un comentario hiriente no convierte a una persona en dañina. Pero hay que estar atentos: las conductas repetitivas, el desprecio constante, el juicio o el control emocional sí lo hacen. La línea entre un roce puntual y una relación nociva puede ser muy fina…".

Priorizar el bienestar propio

Hay que evitar convivir o tratar con frecuencia con personas que provocan malestar. Esto "genera un desgaste emocional profundo, y puede ser el germen de enfermedades físicas y psicológicas si no se gestiona bien".

¿Cómo salir de este embrollo? Según Marian Rojas, no existe una única solución, pues "cada situación es distinta, y cada vínculo necesita ser valorado con calma, distancia y conciencia". Lo importante, eso sí, "es escucharte, analizar cómo te hace sentir esa persona y priorizar tu bienestar".

"No todo el mundo que entra en tu vida está destinado a quedarse. Algunas personas son parte del camino… pero no del destino", concluye.