Odontología

El médico Manuel Viso explica el peligro de las bacterias del cepillo de dientes: "Pueden provacarte infecciones de las válvulas del corazón"

El dentista de los famosos David Jiménez revela el secreto de una ‘sonrisa de Instagram’ saludable con carillas

Una chica se cepilla los dientes.

Una chica se cepilla los dientes. / PI

Alexandra Costa

Por qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Dedicamos tiempo y esfuerzo a cepillarnos los dientes, buscando mantener una boca sana y una sonrisa brillante. Sin embargo, ¿somos realmente conscientes de la higiene de nuestro cepillo de dientes, esa herramienta esencial en nuestra rutina diaria? El médico y divulgador Manuel Viso, conocido en redes sociales como "manuelvisothedoc", ha alertado sobre los riesgos de descuidar la limpieza y la renovación del cepillo, revelando el peligroso mundo de bacterias que puede albergar y cómo esto puede afectar nuestra salud general.

El doctor Viso, basándose en un estudio de la Universidad de Manchester, subraya que las cerdas de la mayoría de los cepillos de dientes albergan más de 10 millones de colonias de bacterias. Esta alarmante cifra pone de manifiesto la necesidad de prestar una mayor atención a la higiene de este objeto personal.

La acumulación de microorganismos en el cepillo puede desencadenar una serie de problemas de salud que van más allá de la cavidad bucal. Desde la gingivitis y las caries, hasta infecciones más graves como la endocarditis, una infección de las válvulas del corazón que puede ser mortal, los riesgos son significativos.

¿Por pué se acumulan las bacterias en el cepillo?

El doctor Viso explica que la acumulación de bacterias en el cepillo se debe a diversos factores:

  • Mala higiene bucal: una higiene bucal deficiente deja restos de comida y placa bacteriana en la boca, que se transfieren al cepillo durante el cepillado.
  • Contacto con las manos: tocar el cepillo con las manos sucias introduce bacterias en las cerdas.
  • Almacenamiento inadecuado: colocar el cepillo en un lugar sucio o húmedo favorece el crecimiento bacteriano.
  • Aerosoles del inodoro: al tirar de la cadena del inodoro con la tapa abierta, se generan aerosoles que contienen microorganismos que pueden depositarse en el cepillo, especialmente si se encuentra cerca.
  • Compartir el cepillo: cada persona tiene una microbiota oral única, por lo que compartir el cepillo con otros es un factor de riesgo importante.

Recomendaciones para una higiene adecuada del cepillo

Para minimizar el riesgo de contaminación bacteriana en el cepillo de dientes, el Dr. Viso ofrece las siguientes recomendaciones:

  1. Limpieza después de cada uso: enjuaga el cepillo con agua caliente después de cada cepillado, intentando eliminar todos los restos de comida y residuos que puedan quedar atrapados en las cerdas. Además, considera utilizar un enjuague bucal con clorhexidina o agua oxigenada para desinfectar el cepillo.
  2. Evitar la humedad: no dejes el cepillo húmedo, ya que la humedad favorece el crecimiento bacteriano. Sécalo al aire o utiliza papel higiénico limpio en lugar de una toalla, que podría estar contaminada.
  3. Cuidado con el almacenamiento: deja que el cepillo se seque al aire sin taparlo con un capuchón, a menos que necesites transportarlo. Evita guardarlo en un armario cerrado, ya que la humedad acumulada podría promover la proliferación de bacterias.
  4. Precaución con la pasta de dientes: evita que la punta del tubo de pasta de dientes entre en contacto con las cerdas del cepillo, ya que las bacterias de las cerdas podrían contaminar la pasta.
  5. No compartir el cepillo: bajo ninguna circunstancia compartas tu cepillo de dientes con otras personas, ni siquiera con tu pareja o familiares.
  6. Renovar el cepillo regularmente: cambia tu cepillo de dientes cada dos o tres meses, o incluso antes si has estado enfermo con gripe, COVID-19 u otra infección respiratoria.

Impacto en el corazón

La importancia de la higiene dental va más allá de la prevención de caries y enfermedades de las encías. La Fundación Española del Corazón advierte que una buena salud bucal puede ayudar a reducir el riesgo de sufrir un infarto.

Cuando la higiene oral es deficiente, las bacterias que se acumulan en la boca pueden desencadenar procesos inflamatorios que afectan a todo el organismo, incluyendo el sistema cardiovascular. Estudios han demostrado que la presencia de ciertas bacterias en la cavidad oral, especialmente aquellas relacionadas con la periodontitis, aumenta el riesgo de episodios cardíacos como el infarto de miocardio o la angina de pecho.

Se cree que las bacterias orales pueden entrar en el torrente sanguíneo, favoreciendo la formación de placas en las arterias y aumentando el riesgo de enfermedades cardiovasculares.