Cómo limpiar la plancha

Planchar la ropa es una de las tareas del hogar más engorrosas. Pero a veces no queda otra si necesitas ir como un pincel o, simplemente, si eres de los que se compra ropa de tejidos que suelen arrugarse, es decir, de telas de fibras naturales (lana, lino, algodón…) porque no te gustan las sintéticas (poliéster o lycra).

En ocasiones, la base de la plancha, que suele estar hecha de aluminio, antiadherente, acero inoxidable, teflón y aluminio pulido se ha oxidado o se ha quedado ennegrecida porque se ha quemado.

¿Cuál es el truco para planchar la ropa de forma rápida y fácil?

Y hay que limpiarla, principalmente para no manchar la ropa que se planche con ella, pero también para una correcta optimización del aparato.

Paño y sal

Para ello, hay que coger un paño seco y echarle cucharadas de sal fina. Posteriormente, se enciende la plancha y se espera a que se caliente a temperatura media, momento en el que, con cuidado, se frota la base de la plancha hasta que desaparezcan las marcas de suciedad o quemaduras.

Una vez se haya finalizado el proceso, se apaga la plancha y se deja que se enfríe, limpiando después con un paño húmedo para quitar cualquier resto que se haya podido quedar adherido.