Energía optimizada

Cómo purgar y limpiar los radiadores para este invierno: el truco definitivo

¿Qué es el pececillo de plata de la humedad y por qué debes acabar con él?

Son una parte fundamental para preservar el calor en el hogar y su mantenimiento resulta indispensable

Un radiador

Un radiador

Lola Gutiérrez

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En mitad del invierno es lógico que los radiadores funcionen a todo gas. Pero para que funcionen a la perfección hay que purgarlos correctamente y tenerlos limpios, puesto que la limpieza influye en su rendimiento y hará que nos protejamos de las bajas temperaturas correctamente.

La forma peculiar de los radiadores facilita la acumulación de polvo y, consecuentemente, dificulta su limpieza. Pero hay algunos trucos para poder limpiar los aparatos para que parezcan nuevos.

El mejor cepillo

Antes de empezar con la limpieza, debemos apagar el radiador y, a continuación, colocar un papel en el suelo para que la suciedad caiga en él y no se disperse por el suelo de casa.

También, si somos sensibles al polvo, es recomendable usar cepillos especiales que tienen la manera específica para llegar a las partes menos alcanzables del radiador. Los cepillos más adecuados para estas zonas serían los que contienen fibras de nylon gruesas y un mango largo y flexible o con varillas con fundas extraíbles de microfibra.

Para la limpieza correcta, tenemos que introducir la varilla desde la parte superior y recorrer toda la superficie hasta abajo, girando el cepillo para que el polvo vaya cayendo en el papel de abajo. En caso de que haya mucha suciedad incrustada, podemos mojar los cepillos con agua y jabón para facilitar la limpieza.

El truco para limpiar el radiador

Pero, para eliminar el polvo de los radiadores, podemos llevar a cabo un truco ideal: jugar con el calor de un secador. El truco consiste en juntar dos trapos húmedos, uno debajo del radiador y otro detrás de la pared, y enchufar un secador y apuntar hacia el radiador para que el aire caliente haga que el polvo salga y que quede impregnado en los paños.

En caso de tener una máquina como una vaporeta, puede ser más eficaz en la limpieza de los radiadores, y hay muchas que vienen con boquillas largas y finas que pueden acceder mejor en los huecos del radiador.

Cuando hayamos realizado la limpieza, es primordial dejar secar durante un par de horas los radiadores sin encenderlos.