¿Por qué 'ti' no lleva acento si 'mí' sí lleva?

La tilde, a parte de indicar cuál es la sílaba que se pronuncia con acento, pueden ejercer otra función de diferenciación con otras palabras que se escriben igual: la llamada tilde diacrítica.

Siguiendo la regla general, los monosílabos no llevan tilde, ya que no son palabras polisílabas y no requieren de un acento que diferencie la sílaba tónica. No obstante la regla general aludida, existen unos cuantos monosílabos de uso frecuente que se escriben con tilde: tú, él, mí, sí, sé, dé, té, qué, quién. Estos monosílabos llevan la tilde diacrítica.

'Mí' y 'mi'

En ese pequeño grupo de monosílabos escritos con tilde diacrítica se encuentra la palabra 'mí', pronombre personal tónico de primera persona de singular (A mí me gusta). Este dispone de una tilde diacrítica, que distingue el monosílabos tónicos del posesivo átono mi (mi casa).

'Ti'

El parecido formal y la identidad funcional de el pronombre 'ti' con 'mí' invita a pensar que también ha de tildarse y, así, muchos escriben erróneamente con tilde este monosílabo.

Sin embargo, este pronombre tónico no debe tildarse por una simple razón: la tilde ahí no está justificada porque no existe otra palabra idéntica, pero átona, de la que deba distinguirse. Por lo tanto la tilde diacrítica ahí no debe aparecer en ningún caso.