Registros de temperatura

Catalunya vive su primera oleada de noches tropicales con termómetros por encima de los 20ºC

Decenas de municipios costeros, desde el Empordà hasta el delta de l'Ebre, se fueron a dormir anoche con temperaturas muy por encima de la media para la estación

En La Ràpita (Montsià), los termómetros no han bajado de los 23,2 grados y en BCN se ha llegado a mínimas de 22,8 grados

Catalunya se adentra en una semana de calor extremo con máximas cercanas a los 40 grados

Imagen de archivo del 2023 en Barcelona. Por el calor, las personas se dan baños en la playa de la Barceloneta y San Sebastián durante el verano.

Imagen de archivo del 2023 en Barcelona. Por el calor, las personas se dan baños en la playa de la Barceloneta y San Sebastián durante el verano. / Manu Mitru

Valentina Raffio
Francisco José Moya
Barcelona
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Conciliar el sueño la pasada noche fue especialmente complicado para los miles de ciudadanos que residen en la costa catalana y que, según apuntan los registros, han vivido una noche extremadamente cálida para la época. Según apuntan los datos del Servei Català de Meteorologia, al menos una treintena de municipios catalanes acaban de vivir una noche tropical con mínimas que no han bajado de los 20 grados, una cifra a partir de la cual los expertos afirman que se entorpece el descanso y aumentan los problemas de insomnio. En La Ràpita (Montsià), los termómetros no han bajado de los 23,2 grados ni en el momento más fresco de la noche. En Barcelona se ha llegado a mínimas de 22,8 grados, la mínima más alta de lo que llevamos de año.

Barcelona registró su primera noche tropical a finales de mayo y desde entonces todas las noches han estado por encima del umbral de los 20 grados

Esta primera oleada generalizada de noches tropicales en Catalunya, que ya destaca como la más extensa de lo que llevamos de año, se ha hecho sentir sobre todo en la costa catalana, desde el Empordà hasta el Delta de l'Ebre, y ha abarcado al menos una treintena de municipios de todo el territorio. Este fenómeno, muy relacionado con la influencia del mar, que agrava la sensación térmica y ralentiza el descenso de temperaturas por la noche, no es nuevo pero sí destaca por su extensión y, sobre todo, por las fechas en las que estamos. A estas alturas del año es habitual que se empiecen a dar noches tropicales pero no que se den de forma tan extendida.

En Barcelona, por ejemplo, lo normal por estas fechas sería que las mínimas rondaran los 15 grados. Pero en las últimas décadas, debido al impacto del calentamiento global, esta cifra ha ido en aumento y se ha acercado cada vez más a umbrales más típicos de mediados de verano y no de principios de estación. Los registros confirman que las noches tropicales, que antaño eran una anomalía, no solo aparecen cada vez antes sino que se han convertido en algo cada vez más habitual. Este año, por ejemplo, la primera noche tropical barcelonesa se ha registrado a finales de mayo y, desde entonces, todas las noches han estado por encima del umbral de los 20 grados

En 1950, por ejemplo, el Observatori Fabra, el más antiguo de la ciudad y uno de los más importantes de Catalunya, registró su primera noche tropical un 28 de junio. En los siguientes 50 años, prácticamente todos los veranos se registró la primera noche tropical entre mediados y finales de este mes. Pero desde la década de los 2000 hasta ahora, en casi la mitad de los años se ha empezado a registrar este femómeno durante el mes de mayo. Varias semanas antes de lo históricamente habitual. En el año 2022, por ejemplo, la primera noche tropical se vivió un 21 de mayo y desde entonces se vivieron al menos 76 noches por encima de ese umbral. 

Otro ejemplo paradigmático es el caso del Raval. Desde el año 2009 hasta ahora también se ha observado un adelanto de las primeras noches tropicales, que ya es habitual que empiecen a darse a finales de mayo, así como un claro aumento de la frecuencia de este fenómeno. En la última década, de hecho, ya se están registrando una media de un centenar de noches por encima de este umbral cada año. El caso más extremo se vivió en el año 2022, cuando se sumaron un total de 128 noches por encima de los 20 grados. El año pasado, además, se calcula que los termómetros del centro de la ciudad sumaron más de 30 días consecutivos con cifras por encima de los 25 grados entre las nueve de la tarde y medianoche.

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