DOCUMENTAL EN NETFLIX

Guillermo Vilas, el número 1 que nunca fue

Al tenista argentino se le privó de liderar el ránking de la ATP y una investigación de un documental lo demuestra

Guillermo Vilas saludando a los aficionados durante un partido de Roland Garros

Guillermo Vilas saludando a los aficionados durante un partido de Roland Garros / periodico

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Guillermo Vilas fue una de las primeras ‘rockstars’ de la Era Open del tenis, con su melena salvaje y su carisma iconoclasta. También, por supuesto, fue uno de los grandes jugadores de la historia del circuito. El zurdo argentino fue uno de los pioneros del efecto liftado y el inventor del golpe conocido como Gran Willy -consistente en dar a la pelota por entre las piernas y de espaldas a la red-, y el primer sudamericano en ganar un Grand Slam. Obtuvo cuatro a lo largo de sus 18 años de carrera.

Vilas es uno de los grandes iconos deportivos de Latinoamérica y, obvio, especialmente de su país natal; y los argentinos, ya se sabe, se toman muy en serio a sus ídolos. Por eso a muchos compatriotas les frustra y les duele que Vilas nunca llegara oficialmente a lo más alto del ránking ATP y en cambio otros tenistas del continente, como el brasileño Gustavo Kuerten y el chileno Marcelo Ríos, sí consiguieran esa gesta atesorando menos méritos.

Uno de esos indignados es Eduardo Puppo. A lo largo de más de una década, el periodista ha recopilado una cantidad abrumadora de documentación que parece dejar en evidencia la injusticia cometida contra el apodado ‘joven toro de las Pampas’ por su fuerza y su resistencia. Ahora, la investigación de Luppo es la columna vertebral de ‘Vilas: serás lo que debas ser o no serás nada’, documental recién estrenado en Netflix que asimismo repasa la vida y milagros de su héroe titular e incluye apariciones estelares de leyendas como Roger Federer, Boris Becker, Gabriela Sabatini y Rod Laver; también de Björn Borg y Rafa Nadal -su heredero natural-, con quienes el porteño compone la Santísima Trinidad de la tierra batida.

Culpa de la tecnología

Los ránkings de la ATP, que ahora se publican semanalmente, durante mucho tiempo carecieron de un calendario de publicación estricto; en la prehistoria de la era informática, después de todo, calcular las clasificaciones era todo un desafío. Por entonces, además, el sistema de puntuación recompensaba sobremanera a los jugadores muy selectivos a la hora de competir, y eso explica que el estajanovista Vilas no lograra el número 1 en 1977 pese a que aquel año ganó Roland Garros, el US Open y otros 14 torneos. En su año más prolífico, 2006, Federer ganó 12.

Durante sus pesquisas, Puppo acumuló 1.200 páginas de documentos y revisó los 23.000 partidos oficiales jugados entre 1973 y 1978. “Contacté con exdirectores de torneos, expresidentes de la ATP, periodistas de la época, agencias de noticias, hemerotecas... la casa se convirtió en un depósito de pruebas”, recuerda el periodista en la película. Como resultado, quedó claro que a Vilas se le había negado la oportunidad de arrebatarle a Jimmy Connors el número 1 en dos períodos específicos -cinco semanas a partir del 22 de septiembre de 1975 y las primeras dos semanas de 1976- porque durante ellos no se habían publicado ránkings.

Pese a ello, en 2015 los gerifaltes de la ATP decidieron hacer caso omiso a las alegaciones de Puppo, aduciendo que otorgarle a Vilas el primer puesto tantos años después crearía una reacción en cadena de reclamaciones. El extenista guarda silencio sobre el asunto desde hace años; vive semirrecluído en Mónaco, se dice que aquejado de alzheimer, consolado por la evidencia de que tanto quienes fueron sus rivales como la prensa especializada de la época apoyan su causa. Puppo, por su parte, no tiene intención de dar la batalla por perdida.