Badosa acaba su sueño en París

La tenista catalana se despide en octavos de su mejor actuación en un Grand Slam ante la alemana Siegemund (7-5, 6-2)

jPaula Badosa golpea de revés.

jPaula Badosa golpea de revés. / periodico

Jaume Pujol-Galceran

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

El sueño de Paula Badosa en Roland Garros acabó en París. En la pista Simone Mathieu, un cielo gris y 10 grados de temperatura, la tenista catalana perdió su partido de octavos de final ante la alemana Laura Siegemund por 7-5 y 6-2. Badosa, con problemas en las lumbares, fue de más a menos hasta ceder la victoria y sus ilusiones. 

Badosa ha cedido el primer set después de tener una ventaja de 5-3 y haber recuperado el 'break' de salida (1-2) que le hizo Siegemund. La tenista alemana ha empezado a ser un muro desde el fondo de la pista, aguantando y devolviendo los poderosos golpes de la catalana (su derecha a 122 km/h) y rompiéndola con dejadas.

Así Siegmund ha conseguido remontar la situación y ganar cuatro juegos seguidos ante la desesperación de Badosa que encadenaba una racha de seis errores no forzados seguidos y miraba desesperada hacia su nuevo entrenador Javier Martí, sin encontrar soluciones a su bajón de juego. 

Problemas físicos

Siegemund se ha llevado la primera manga en 52 minutos y ha empezado la segunda haciendo un nuevo 'break' a Badosa y adelantarse 2-0. La tenista de Begur logró salvar la situación con su siguiente saque en un juego que se alargó siete minutos en el que después de un 40-0 tuvo que salvar dos nuevos 'break points' antes de hacerlo suyo. Badosa pidió atención médica por molestias en las lumbares y fue atendida en la pista mientras Siegmund, comía de una bandejita que pidió, se enfundaba el anorak y después hacia ejercicios en la pista esperando.

Badosa se ha enfundado una sudadera para proteger su espalda del frío y buscar una reacción que no ha podido llegar, tras ceder de nuevo su saque (5-2) y poner fin a su mejor Roland Garros con la desilusión en su rostro y tres últimos errores no forzados en 1 hora y 36 minutos. por una oportunidad perdida. 

El peor final

"Me voy fastidiada. Si lo miro fríamente, he hecho muy buen torneo, pero soy muy competitiva y perder así, sin poder hacer mi juego no me gusta", valoraba tras la derrota. Badosa estaba haciendo el mejor torneo de una carrera que, a sus 22 años, ha vivido montada en una montaña rusa de alegrías y decepciones desde que ganó el título júnior en el 2015.

“He pasado por momentos de ansiedad, depresión y miedo. Perdí la ilusión por jugar al tenis”, decía cuando hace un par de años Xavi Budó, entrenador de Carla Suárez, la sacó del pozo y la ayudó a reconstruirse como tenista y como persona. “Era un juguete roto”, decía el técnico catalán con quien, inesperadamente acabó su relación, tras lograr las semifinales de Estambul y antes de venir a Roland Garros.

la tenista de Begur se marcha con un sabor agridulce, aunque con su mejor ránking (65 mundial) y tras eliminar  a dos campeonas de Grand Slam, la estadounidense Sloane Stephens, campeona del Abierto de EEUU en el 2018 y Jelena Ostapenko, campeona en Roland Garros en el 2017.

Badosa, única representante femenina que quedaba en el cuadro, tras la eliminación de Garbiñe Muguruza, la ronda anterior.  Por primera vez desde hace nueve años no habrá ninguna tenista española entre las ocho últimas aspirantes al torneo. Una relación en la que la mejor clasificada es la estadounidense Sofia Kenin, campeona del Abierto de Australia de este año, que ha eliminado a la esperanza francesa Fiona Ferro (2-6, 6-2, 6-1). 

Siegemund, la más veterana de las últimas 16 tenistas en Roland Garros, con 32 años, nunca había pasado de tercera ronda en sus 15 participaciones en Grand Slam, Clasificada en el puesto 66 mundial se enfrentará en los cuartos de final a la checa Petra Kvitova que ha ganado a la china Shuai Zhang (6-2, 6-4).