Ciencias de la Tierra

Detectan un misterioso pulso que proviene de las profundidades de la Tierra y que podría partir a África en dos

El descubrimiento revela una columna de manto pulsante debajo de Etiopía, donde se está formando un nuevo océano

Flujos frescos de lava basáltica en la región de Afar, Etiopía.

Flujos frescos de lava basáltica en la región de Afar, Etiopía. / Créditos: Dr. Derek Keir, Universidad de Southampton/Universidad de Florencia.

Redacción T21

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Los científicos han descubierto un pulso similar a un latido del corazón que emana del interior de la Tierra, debajo del continente africano: creen que algún día destrozará a África en pedazos, entre otras consecuencias.

Un equipo internacional de investigadores liderado por la Universidad de Southampton, en Inglaterra, ha anunciado el hallazgo de un pulso rítmico, comparable a un latido cardiaco, que emana del manto terrestre bajo África. Este fenómeno ha sido detectado en la región de Afar, en Etiopía, donde convergen tres sistemas de fallas geológicas y actividad volcánica.

Oleadas rítmicas

De acuerdo al nuevo estudio, publicado en la revista Nature Geoscience, se trata de “oleadas” de material fundido procedentes del manto, que ascienden de forma periódica y podrían estar desgarrando el continente hasta originar un nuevo océano. La Dra. Emma Watts, líder del equipo científico, recolectó y analizó junto a sus colegas más de 130 muestras de roca volcánica de la cuenca de Afar y de regiones cercanas, aplicando técnicas de modelado estadístico avanzado y estudios geoquímicos.

A partir de ese trabajo, los científicos identificaron bandas químicas alternas en el flujo del manto, que se asemejan a un "código de barras" geológico. Estas bandas se repiten a intervalos regulares, conformando pulsos rítmicos que varían según la velocidad y el grosor de la placa tectónica que se encuentra por encima de ellas.

Según explica Watts en una nota de prensa, “el manto bajo Afar no es estático ni homogéneo: pulsa y cada pulsación transporta una firma química distinta. Estos pulsos fluyen canalizados por las placas en extensión, influyendo en las zonas donde la litosfera se adelgaza hasta romperse”.

África partida por un nuevo océano

Este descubrimiento aporta una nueva perspectiva sobre los procesos que vinculan al interior profundo del planeta con su superficie, demostrando que el movimiento del manto y la actividad tectónica están estrechamente entrelazados. Las pulsaciones del manto no solo alimentan el vulcanismo, sino que también pueden modular la sismicidad local y, a largo plazo, generar la separación continental.

Referencia

Mantle upwelling at Afar triple junction shaped by overriding plate dynamics. Emma J. Watts et al. Nature Geoscience (2025). DOI:https://doi.org/10.1038/s41561-025-01717-0

Los geólogos advierten que este proceso, en marcha desde hace millones de años, desembocará en la formación de un nuevo cuerpo de agua que separará la cuenca somalí del resto de África, en un plazo aproximado de entre 10 y 20 millones de años. La región de Afar es el escenario más avanzado de dicha fragmentación continental: sus estructuras actuales ofrecen una oportunidad única para investigar la génesis de océanos.

Además de las consecuencias concretas para el continente africano, comprender la dinámica de estos pulsos puede contribuir a mejorar la predicción de erupciones volcánicas y terremotos asociados a zonas de fallas geológicas. Específicamente, al comprender cómo y a qué ritmo fluyen estos pulsos bajo las placas, será posible anticipar mejor los focos de actividad volcánica y sísmica.

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