La lógica eco de una marca pionera en Barcelona

La lógica eco de una marca pionera en Barcelona

La lógica eco de una marca pionera en Barcelona / periodico

MAR ROCABERT

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Si hacéis la prueba de escribir moda ecológica en el buscador por antonomasia, veréis que la primera marca en aparecer es Ecoology. El mérito no es de un buen estratega en posicionamiento, sino la osadía y perseverancia de Eva García, que empezó esta firma pionera en Barcelona el 2011 con cuatro socias, y tres años después sigue al frente de la nave ella sola, convencida de que el riesgo de naufragio de la moda sostenible ha amainado. 

Ella era modelo, y a menudo hacía de maniquí para pruebas de ropa. Entre cambios de vestuario y ensayos de caídas, descubrió su devoción por los talleres de confección, los tejidos y todo lo que se mueve en el ‘backstage’ de una colección. Con las manos de diseñadores y patronistas bien cerca, fue aprendiendo el oficio y, después de estudiar un máster de dirección de empresas, se lanzó a crear su marca. 

Pero no todo lo que hay detrás de la producción de moda iba con ella, acostumbrada a la alimentación ecológica y a aprovecharlo todo. Así que decidió que, por lógica, su marca sería eco. Trabaja con tejidos orgánicos, y nunca tira restos de telas, que siempre acaban en algún diseño nuevo. Fabrica en talleres locales, actualmente con uno de Mataró y otro de Barcelona, el de Dona Kolors, que da trabajo a mujeres en riesgo de exclusión social.

Para Eva, Ecoology contribuye a sus ideales, es su manera de respetar el mundo donde vive. Apuesta por la colección continua y sus diseños son atemporales. Hace piezas de edición limitada que no la atan a la imposición de novedades constantes del ‘fast fashion’, una manera de producir que no quiere ni puede seguir. Está convencida de que los consumidores de moda sostenible tampoco demandan este ritmo de actualización, sino que buscan tejidos de calidad y ropa que dure en sus armarios.

Sus diseños son sobre todo para mujeres, pero también hace algunas camisetas para hombres. Los tejidos que utiliza, siempre con certificados, son el algodón orgánico, el tencel, el bambú el modal y el cupro, la lana ecológica o también el más sorprendente tejido de algas, que mezclado con algodón orgánico da una tela suave de tacto muy fresco y agradable. De este tejido es, por ejemplo, el vestido Mimi, de color rosa empolvado con escote en forma de pico y volante delantero y trasero.

Nos asegura que encontrar los tejidos es la parte más complicada de su trabajo. Después de dedicar muchas horas a investigar, ha encontrado pequeños proveedores que no la obligan a comprar miles de metros. Eso sí, estos están a muchos quilómetros, normalmente en Índia China, porque aquí no se encuentran. Ecoology tiene puntos de venta en diferentes ciudades españolas, y en Barcelona la encontraréis en Gaia, Coshop, Humus y Clip Eixample. Además, podéis comprar sus modelos online.

Reconoce que no es un camino fácil y que, a base de patacazos, se ha ido fortaleciendo. Algunos días lo tiraría todo por la borda, pero otros se reconforta comprobando que no está sola en el barco, al que cada vez se suben más emprendedores decepcionados con la moda depredadora. Sigue convencida la batalla de diseñadores como Vivienne Westwood, que ha convertido la campaña Climate Revolution en su insignia; la revista Replanet, promotora de un lifestyle sostenible; o marcas de referencia como L’Herbe Rouge, People Tree o Amour Vert.

Este post se ha publicado en el blog de tendencias sostenibles www.cucdecol.com