Comunicado oficial

Paz Padilla denuncia una campaña de odio en su contra y responde contundente ante las acusaciones sobre la propiedad de La raspa

La presentadora aclara que solo protege un diseño concreto para ropa y advierte de acciones legales contra quienes difundan "mentiras y calumnias".

Paz Padilla y su hija Anna Ferrer

Paz Padilla y su hija Anna Ferrer / Europa Press

Carlos Merenciano

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Madrid
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Paz Padilla ha roto su silencio con un comunicado de casi seis minutos difundido en sus redes sociales para desmontar lo que califica de “campaña de desprestigio” a raíz de la disputa comercial que enfrenta a la firma Nonina Zahara, de la que es socia, y una tienda de la misma localidad gaditana. La humorista sostiene que nunca ha intentado registrar “la raspa universal”, icono habitual en las costas andaluzas, sino únicamente “un diseño específico” creado por el ilustrador Xoan Viqueira y registrado en 2019 para su uso en textil y complementos.

Padilla explica que Nonina remitió hace unos días un burofax “habitual en materia de propiedad industrial” para pedir al otro negocio que dejara de utilizar un dibujo “lo bastante parecido” al suyo como para generar “riesgo de confusión” entre los consumidores. Tras una primera conversación “cordial”, asegura que la otra parte “optó por la vía mediática”, acusándola incluso de querer adueñarse del símbolo pesquero. “Quien diga que he prohibido usar la raspa miente”, recalca antes de poner como ejemplo que cualquiera puede estampar un oso o un galgo, pero no los de marcas como Tous o Bimba y Lola.

La presentadora lamenta que la controversia se esté ventilando “en platós y redes y no ante la Oficina Española de Patentes y Marcas o, si hace falta, en los tribunales”, y denuncia que se han vertido “afirmaciones falsas” con el único fin de “generar odio y dividir a la gente de Zahara de los Atunes y Barbate”. Afirma haber llevado siempre el nombre de Cádiz “por bandera” y recuerda que jamás objetó a otras tiendas que usan raspas “con diseños claramente distintos”.

Por último, Padilla anuncia que su equipo legal prepara acciones contra los comentarios que, a su juicio, han sobrepasado “el derecho a la crítica” y vulneran su honor. “No voy a entrar en este juego mediático”, concluye, al tiempo que agradece el apoyo recibido de clientes y vecinos: “La raspa no es nuestra ni hemos pretendido que lo sea; solo defendemos la autoría de nuestro dibujo, como haría cualquiera”.