Arrancan los primeros castings de 'Gran Hermano' en Barcelona: se buscan nuevos inquilinos para un "casoplón"

No hay ola de calor que frene esto. La llamada de Gran Hermano es más fuerte que nunca. Con pelucas, pancartas y puro show han acudido hoy más de 75 personas a las primeras pruebas de selección, que se han celebrado en el Hotel Catalonia Barcelona, para participar en la próxima edición de Gran Hermano.

Con esta parada en Barcelona, el reality inaugura así una gira de castings por toda España, pasando por Sevilla, Madrid y Bilbao, para celebrar su esperada edición número 20º. El objetivo es claro: encontrar los nuevos inquilinos que habitarán la casa más mediática del país.

Hace ya más de 20 años que se estrenó en España el programa y tras 19º ediciones, ya ha pasado a formar parte del ADN pop español. Es más, la propia directora del casting de GH, Teresa Colomina, lo define como “el ‘reality’ madre de todos los ‘realities’”. Y es que esta adaptación del formato holandés ‘Big Brother’ es el ‘reality show’ más longevo de la televisión española. Con una premisa simple, pero adictiva -un grupo de personas convive en una casa aislada y sin contacto con el exterior. Están vigilados las 24 horas y son sometidos a pruebas y expulsiones- regresa un año más a la televisión, pero esta vez pasado el verano.

Una edición llena de sorpresas

Este año viene cargado de sorpresas, ya que para celebrar esta edición tan especial el programa cambia de escenario.”Nos cambiamos de casa”, ha revelado Colominas. “Va a haber un casoplón en una nueva ubicación", ha agregado.

Zaragoza, País Vasco, Tarragona… El casting de GH en Barcelona parece un mapa de España agitado. Y entre los aspirantes se encuentran todo tipo de perfiles, afirma Colomina. Sin embargo, señala que este año hay una variedad gigante de madres jóvenes. Mujeres alrededor de los 20 y 30 que ya tienen niños y, aun así, apuestan por entrar en GH y darse un momento para ellas, añade la directora de casting.

Y en medio de un escenario de lo más variopinto, el equipo de casting se deja “sorprender”. “Nosotros no buscamos, encontramos”, confiesa Colomina. Todos los aspirantes que han acudido hoy al casting ya han pasado un proceso de selección online previamente. Así que la convocatoria de hoy es “de lo más gourmet”. 

Entre risas, nervios y puro espectáculo, los candidatos se preparan. Aquí no hay currículums ni entrevistas serias que sirvan. Aquí se viene a destacar y a dejar huella desde el primer momento. “Los concursantes despiertan pasiones, son las joyas del programa”, sostiene la directora de casting.

Un ejemplo es Alberto (34 años, Zaragoza), quien está decidido a hacer historia: “Quiero ser el primer gay que gane Gran Hermano, lo tengo clarísimo”, ha proclamado. 

Algunos es la primera vez que se ponen delante de una cámara, otros, en cambio, ya se presentaron a anteriores convocatorias. Sin embargo, todos comparten un mismo objetivo: llevarse el premio de 300.000 euros a casa. 

Laura (26 años, Terrassa), por ejemplo, lo tiene claro. Con el premio le gustaría ayudar económicamente a sus padres, liquidar hipotecas y abrir una discoteca junto a su novio. Alberto (34 años, Zaragoza) tampoco ha dudado ni un segundo: “Yo ponerme pelo la verdad”, ha confesado que sería lo primero que haría con el dinero de dicho premio.

La prueba de castings es fugaz pero intensa. Con las cámaras encendidas, los aspirantes tienen apenas dos minutos para fascinar al equipo de casting. Una presentación breve y directa en la que todo vale, mientras rija la autenticidad.  

Un día lleno de emociones donde todos creen, aunque sea por unas horas, que pueden llegar a entrar en la casa. Entrar en la casa ya es parte del premio, sí. Pero participar en los castings y gritar “esta es mi oportunidad”, forma parte del programa y su experiencia. En Barcelona finaliza así una jornada de castings, pero el espectáculo solo acaba de empezar. 

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