Televisión y Mas

Jordi González, en Col·lapse

Jordi González, en Col.lapse

Sergi Mas

Sergi Mas

Por qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Tras una notoria ausencia apareció en televisión Jordi González, que explicó la delicada situación de salud que ha sufrido recientemente, y que ahora maneja sus prioridades en función de sus apetencias personales (“no voy a bodas”) o profesionales (“me gustaría hacer radio o televisión).

A estas alturas de la vida conviene ser egoísta y mandar sobre uno mismo. Celebro el futuro retorno de quien desde sus inicios en Ràdio Barcelona (la radio siempre es la mejor escuela) y empezando por “La Palmera” ha sabido fabricar y vender entretenimiento y ha formado parte de nuestras vidas. Ben tornat, Jordi!

El nivel de calidad de los invitados de Ricard Ustrell es excelente y me recuerda mucho a los niveles de producción de invitados del mítico Àngel Casas Show, aquel buque insignia que se emitió en los inicios de “la nostra” durante cuatro años (1984-1988)… en los que Ustrell ni siquiera había nacido. Enhorabuena al equipo de producción y a su decisión de dejar la pantalla. Aunque no siempre es posible conviene realizar un stop.

Cuchillos de familia

Presencié el pasado viernes algo que he visto muy poco en televisión: el ejemplo ideal de un gran menosprecio a un colega en un plató. Para mi fue voluntario. Ocurrió, cómo no, en el inicio de La Familia de la Tele, disimuladamente, y fue lo peor que le puede ocurrir cuando un programa lleva 25 entregas y es una nave sin rumbo.

Tomó la palabra Inés, que mirando a cámara, expresó: “Una persona está a punto de llegar para liarla más parda que el calor del albero del Rocío…” En esto que María Patíño recoge y dice… “fíjate, y de verdad, COMPAÑERA, si lo que acabas de dec… DE LEER, es real… “. ¿Perdón? ¿De leer? Ese trato en directo es una burla, es un abuso de autoridad, . “Leer”. No nombrarla, no citarla, llamar “compañera” a alguien que ocupa tu mismo status… me resulta todo menos gratificante y bonito. Las cifras negativas jamás acompañan a un buen rollo en un plató. 

La Nations de Rivero

Durante esta Nations League de fútbol Juan Carlos Rivero no ha dejado a nadie indiferente: cantó un gol del Real Madrid en lugar de la selección española, estuvo a punto de pronunciar ‘Cucaracha’ para mencionar a Cururella y durante la final del domingo el realizador pinchó unos seguidores que enarbolaban la bandera española antigua, la del pollo, la facha: “esa bandera ya no vale… felizmente”. Pues eso: felizmente.