La crítica de Monegal: Cuatro Borbones juntitos, a pesar de ellos mismos

Ya les dije el viernes que en el telehipódromo de la ‘celtiberia-show’ la imagen más buscada del funeral sería la borbónica parada. Se aseguró durante todo el fin de semana, en todas las cadenas, que no los pondrían juntos en ningún momento. Pero el protocolo británico nos ha hecho un regalo impagable. Les han colocado juntitos.

Los cuatro, como en un póker borbónico, han hecho las delicias de los cotillas. Y encima Letizia al lado del emérito Juan Carlos, pegaditos los dos, pero seguramente separados por una distancia existencial infinita. Como que la señal televisiva era británica –de la BBC seguramente– el ‘pourparler’ hispano no ha podido explayarse con primeros planos. La tele ‘british' nos daba imágenes que no eran las que aquí se desearían.

Si las cadenas pátrias hubiesen podido meter sus cámaras en Westminster, sus reporter@s volantes nos habrían ofrecido el segundo a segundo de los cuatro Borbones allí agrupados. ¡Ah! Una lástima. No sabemos si se han cruzado alguna palabra. A lo mejor Juan Carlos y Letizia no se han dicho ni pío. Ni buenas tardes. Ni ‘que te vaya bonito’.

Escribo estas líneas antes de que los programas de sarcasmo, como ‘El intermedio’(La Sexta) o ‘Està passant’ (TV-3), hayan comenzado. Imagino que van a mojar pan con un cachondeo bárbaro.

Sí que he visto el ‘info-show Todo es mentira’ (Cuatro). Se desternillaban. Señalaban a los Borbones con cuatro vistosas flechas coloradas para que los distinguiésemos bien en los planos generales, y decían: «¡Esta es la imagen que La Zarzuela lleva dos años intentando evitar! ¡El emérito es uno, pero dá mas guerra el solito que los mil soldados británicos que hay desplegados por allí!». No se sabe lo que le debe haber pasado por la cabeza a Juan Carlos cuando ha visto tanta pompa y boato. A lo mejor se habrá dicho para sí: «Está visto que para que te rindan honores y te hagan homenajes, ¡hay que morirse!». ¡Ahh! Quizá en su caso ni así.

TRÍAS SERÁ ALCALDABLE, SEGURO .– El estreno del ‘Fax’ (8TV) ha consistido en una gloriosa ceremonia de apoyo y exaltación de Xavier Trías. Le insistían, le requerían, le impulsaban, a que se presente como alcaldable de Junts enseguida. Es natural esta promoción publicitaria. Han colocado como conductor de este programa al que fue precisamente portavoz y vocero de Junts. Es indiscutible: si Trías se ha prestado a este masaje, es que se presenta seguro.

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