Tú y yo somos tres
La crítica de Monegal: Piden a Helena G. Melero que sustituya a Laura Borràs
Ferran Monegal
Crítico de televisión
Ferran Monegal
Ferran Monegal
Para que comprendamos, de un solo vistazo, los fabulosos cambios de la parrilla de TV-3, han encargado un programa de autopromoción y publicitario (‘Us estàvem esperant’, producción Mediapro) a un tridente de modernos y a la vez habituales coloboradores de los medios controlados por la ‘corpo’ CCMA. Son Patrick Urbano, Juliana Canet y Serapi Soler. Es un trio muy suelto, con un sentido del humor particular, de absoluta confianza, en línea con el canon que en la sede de Sant Joan Despí agrada.
En especial Juliana Canet, que la temporada pasada ya proclamó en ‘Tot es mou’ su devoción y guerrero convencimiento de que, para alcanzar la independencia, la violencia está plenamente justificada. En este programa especial que les han encargado –los viernes les volveremos a ver, porque han sido agraciados con un programa semanal titulado ‘Tot són problemes’– en este especial, les decía, nos han ofrecido una trepidante diacronía sobre los grandes protagonistas de la parrilla de ‘la seva’.
Fue muy interesante, por ejemplo, cuando entrevistaron a Joel Diaz, el reportero impertinente y volante de ‘Diaz de fúria’ del ‘APM’, que ahora tiene asegurado un ‘late show’ diario titulado ‘Zona Franca’. Le preguntaron qué tipo de humor va a practicar. Contestó: «Humor irreverente, y también humor reverente». ¡Ah! No es una dislexia lo que plantea Joel. Es una forma de sobrevivencia bien demostrada, y que en TV-3 da muy buenos resultados. Supongo que se refiere a un humor irreverente –o sea, caña sarcástica– a los ateos, descreídos y apátridas, y un humor reverencial a los comulgantes. Me gustaría que Joel reflexionase: si lo hiciera al revés sería una originalidad, una rareza, colosal y fantástica. Eso sí, la supervivencia no estaría garantizada.
Pero el momento más hermoso de este programa fue cuando abordaron a Helena G. Melero, que sigue con el ‘Tot es mou, pero ahora por las mañanas. Contó que habría grandes novedades en el mobiliario del plató. Y entonces su entrevistador, Serapi, subyugado ante lo bien que ella se explicaba, le comunicó: «¡Yo te pondría de presidenta del Parlament de Catalunya!». ¡Ahhh! Es una propuesta formidable. Ella se negó. Pero, bien mirado, la Melero como substituta de la Borràs podría ser la solución ideal. La ‘colla de l’arròs’ de Cadaqués estaría encantada. Y el ‘placet’ de Waterloo, asegurado.
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