Nueva temporada

'El foraster' vuelve a TV-3 tras visitar una Catalunya diminuta y pandémica

eL FORASTER

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Inés Álvarez

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La pandemia no ha impedido que ‘El foraster’ prosiga con su misión de visitar pueblecitos de Catalunya en busca de bonitos paisajes e historias humanas. Esta novena edición que estrena TV-3 el lunes, 10 (22.45) es la segunda que Quim Masferrer y su equipo han tenido que grabar en tiempos de restricciones, mascarillas y distancia social, pero aun así han podido conocer a una anciana de 104 años que tiene mucho que contar y un pueblo con banda sonora. “’El foraster’ mantiene su espíritu, su verdad. Y nos emocionaremos, reiremos y nos sorprenderemos muchísimo. Es una gran temporada”, asegura Masferrer a EL PERIÓDICO, totalmente recuperado ya del covid que le impidió presentar 'La Marató' en su 30º aniversario. 

Según el actor y autor teatral, pese a los incovenientes a la hora de grabarlos, estos ‘forasters’ pandémicos tienen un gran valor documental: “Es interesante retratar este momento histórico que nos ha tocado vivir”, sostiene. Además, se congratula de que para unas pequeñas poblaciones heridas por la pandemia, la llegada del equipo haya supuesto “un soplo de aire fresco". Porque también fuera de las grandes urbes han sufrido sus consecuencias. “Hemos podido retratar daños directos y colaterales. Gente que nos ha dejado, evidentemente, pero también tiendas de pueblo pequeñas que han tenido que cerrar por los confinamientos locales y comarcales y por falta de turismo”, cuenta. 

Este es el caso de Roser, vecina de Mura, un pueblecito de la comarca del Bages que aparece en todas las listas de los más visitados y bonitos de Catalunya, que ha tenido que decir adiós a su comercio, el proyecto de su vida. Una historia que conoceremos en el primer programa que abre la temporada, como la de Enric, que ha dado la vuelta a medio mundo y se entiende con todos gracias a su peculiar lenguaje de signos, y la de unos jóvenes que han creado el Murapoly, una vesión local del Monopoly.

Quim Masferrer, en un momento de 'El foraster' (TV-3).

Quim Masferrer, en un momento de 'El foraster' (TV-3). / TVC

Asimismo, como ya va siendo habitual, Masferrer tendrá que decidir si se enfrenta a sus miedos y desciende en rapel por el Puig de la Balma, una espectacular formación rocosa que ha sido escenario de rodajes cinematográficos. Allí se llevará la sorpresa de que su anfitrión será un viejo conocido por la audiencia de TV-3: el presentador del 3/24 Esteve Soler.

Quim Masferrer, en el monólogo de 'El foraster' (TV-3).

Quim Masferrer, durante el monólogo de 'El foraster' (TV-3). / TVC

En Mura visitará también a la persona más longeva de todas las ediciones, Camila, una anciana que a sus 104 años conserva una salud de hierro y una gran memoria. Entre sus recuerdos, un amor que la guerra hizo trizas. “Un pozo de sabiduría. Esa mujer no tiene una entrevista, tiene un monográfico”, asegura el actor.

En esta temporada Masferrer también visitará Pauls. “Un pueblo que tiene un denominador común: la música. Huele a música. Es un pueblo con banda sonora”, describe Masferrer.Y también Sant Llorenç de la Muga, población rodeada de gargantas y ríos, donde recibirá una alocada lección de deporte acuático.

Asimismo, hará una parada en Coma i la Pedra, localidad que acoge la famosa estación de esquí Port del Comte, y visitará Sant Martí Vell, un pueblecito cercano a Girona, donde descubrirá que las múrgoles son más altas que una seta. Además, vivirá la extaordinaria experiencia de dormir bajo un cielo estrellado en las montañas de Tivissa, uno de los municipios más grandes de Catalunya. En esta temporada visitará por fin tres comarcas a las que el programa aún no había llegado: el Pla d’Urgell, que podrá contemplar desde el mirador de Miralcamp; el Baix Penedès atípico que le mostrará Montmell y la Segarra, a la que pertenece Sant Ramon, donde se enterará de una extraña aparición.

El programa vuelve tras una última temporada en la que obtuvo una media de 605.000 espectadores y una cuota de pantalla del 23,7%. Y eso que llevan casi 100 programas emitidos. “Aunque la fórmula y el formato siempre sean los mismos, como toda la gente es distinta, todos los programas son diferentes. Esta es la clave de que 'El foraster' no sea repetitivo y siempre pasen cosas”, concluye Masferrer