La crítica de Monegal: 'La Marató', el cerebro, y Verónica

Siempre les sale una fiesta redonda. Y eso hay que resaltarlo y elogiarlo sin restarle ni un ápice de mérito. 'La Marató' de TV-3 es una experimentada idea (30 años les contemplan) que consigue una filigrana perfecta: funde la sensibilidad con el espíritu altruista de las donaciones, lo envuelve en un impecable formato de gran espectáculo, y el conjunto retroalimenta la potencia de la cadena.

Estoy de acuerdo con lo que dijo Núria Llorach, presidenta en funciones, por mandato caducado, de la CCMA: «Se demuestra que tenemos un país que ‘estima TV-3’». Sí señora. Solo una matización: al menos a medio país la actual TV-3 le duele, y solo se puede sentir dolor por aquello que se quiere.

'La Marató' ha abordado este año las enfermedades de la mente. ¡Ah! El cerebro es el órgano más desconocido, y más complejo, de nuestro cuerpo.

Los testimonios que se han sucedido durante toda la jornada han sido sobrecogedores. En un momento dado de la noche, cuando hablaban de la depresión, una de las presentadoras citó fugazmente el caso de Verónica Forqué. Sí, en la tele, en la mayoría de cadenas, he visto que llevan una semana especulando sobre su muerte. Y ríos de tinta en paralelo en la prensa.

En la mayoría de casos ha sido necrófilo cotilleo. Tertulianos transformados sobre la marcha en falsos psiquiatras de plató han concluido que la actríz se ha suicidado porque tenía el cerebro enfermo. Trastorno mental. Depresión. Sería conveniente que los psiquiatras de verdad salgan y adviertan a tanto parlanchín que hay estudios médicos muy serios acerca del ‘Rational suicide’ (Suicidio racional).

De la misma forma que existe la voluntad de vivir, existe la voluntad de morir. La libertad también es eso. De la parte espectacular y muy entretenida de 'La Marató', quisiera resaltar el ‘show’ de Ana Boadas y Toni Cruanyes. Su recorrido por los musicales ‘Billy Elliot’, ‘Cantando bajo la lluvia’ y ‘Adéu Arturo’, incrustados los dos en sus coreografías, ha sido un imaginativo y simpático momento.

El Antonio Machín de Tiana, o sea Josep Cuní moviendo las maracas y el trasero, también es un clásico que nos ha hecho disfrutar enormemente. Han invitado a Susana Griso, grabada un momento, y le han asignado la introducción de Miguel Ríos. O sea, como que ella está en Antena 3, que presente a los colaboradores extranjeros que vienen de fuera. Ya es eso.

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