Opinión | OPINIÓN

Juan Soto Ivars

Juan Soto Ivars

Escritor y periodista

Eso que hace Vigalondo

Nacho Vigalondo presenta un 'late' de entrevistas diseñado con vileza, en el que los invitados, que van de José Sacristán a Leonardo Dantés (ahora Leonardo A.), tienen que intentar por todos los medios no quedar como unos panolis por ser demasiado serios o demasiado solemnes 

Los felices veinte

Los felices veinte

Nacho Vigalondo tiene un programa en Orange, porque Orange tiene un canal de televisión. Son dos informaciones impactantes y sorprendentes. De Orange, lo último que he sabido es que su presidente y consejero delegado, Stéphane Richard, fue condenado a un año de cárcel y ha dimitido. Saboreé cierta venganza al enterarme, porque había dejado de saber de Orange cuando me obligaron a recorrer una pista de rastreo agotadora y a luchar contra robots asesinos para reclamar una factura. Pero esta gymkana fue menos kafkiana que el programa que le dejan hacer a Nacho Vigalondo. Estoy por perdonar a la empresa, mira lo que te digo.

Se llama 'Los felices veinte' y lleva dos temporadas en marcha. Es un 'late' de entrevistas diseñado con vileza, en el que los invitados, que van de José Sacristán a Leonardo Dantés (ahora Leonardo A.), tienen que intentar por todos los medios no quedar como unos panolis por ser demasiado serios o demasiado solemnes. ¿Cómo encajar esta clase de entrevista sin quedar mal? No es fácil, porque les espera una implacable maquinaria de ironía retorcida. Vigalondo, que entrevista con una permanente expresión de psicópata y lanza y repite preguntas rarísimas, logra crear junto a Aníbal Gómez (Ojete Calor) y Paula Pua una atmósfera de incomodidad opresiva, de manicomio, de after en Usera lleno de cocainómanos a las diez de la mañana.

Pese a que parece diseñado para conectar con el sarcasmo de internet, y a que consigue ser muy gracioso por algún motivo que no he llegado a comprender, en la red es un fracaso espectacular: suben todos los episodios completos a Youtube y rara vez superan las 6.000 visualizaciones, quedándose en algunos casos ¡en 300! No sé cuánta gente lo verá en Orange, pero estas cifras son muy difíciles de entender.

O no. Porque el programa de Nacho Vigalondo es quizás una apuesta demasiado retorcida e inquietante, no ya para los estómagos de hoy, sino para los de todos los tiempos: destinado a ser programa de culto, para lo mejor y lo peor. Este programa es nieto del 'Viaje con nosotros' de Javier Gurruchaga, del 'Sabor a lolas' de Lola Flores, del 'Sabías a lo que venías' de Santiago Segura o 'El peor programa de la semana' del Gran Wyoming, primo del 'Go Ibiza, Go' de Carlo Padial y Didac Alcaraz y, por encima de todo, hijo del 'Toni Rovira y tú' de Toni Rovira, programa increíble, estrafalario y maravilloso del que ya os hablaré otro día.

Suscríbete para seguir leyendo