Primera serie española de HBO Max

Abril Zamora: "En 2021 todavía es importante hacer personajes LGTBI que tengan relevancia"

"Para mí era bonito hablar de transexualidad sin darle demasiada importancia", comenta la creadora de 'Todo lo otro'

abril alzamora

abril alzamora / Zowy Voeten

Marisa de Dios

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Durante su niñez, Abril Zamora (Cerdanyola del Vallès, 1981) estaba enganchada a 'Sensación de vivir' y fantaseaba imaginando cómo sería participar en una serie «con unas tramas tan soprepasadas de dramatismo adolescente». Los chicos pijos de Beverly Hills despertaron su vocación interpretativa, pero no solo se quedó ahí. La actriz que se dio a conocer gracias al papel de Luna en 'Vis a vis' y que compartió planos con Sophia Loren en 'La vida por delante' ha sido guionista de 'Élite', ha escrito teatro y ha creado ficciones como 'Señoras del (H)AMPA' y 'Temporada baja', a las que ahora se ha sumado su proyecto más personal, 'Todo lo otro', la primera serie española de HBO Max. En ella ejerce como protagonista, directora y guionista.

'Todo lo otro' es una historia de treintañeros que no han cumplido sus sueños. ¿Quería hacer el retrato de una generación? 

No es una historia generacional, aunque la mayoría de los personajes estén en la treintena, porque los conflictos por los que transitan los pueden también sentir como propios personas de 15, 40 o de 50 años. Hablamos de temas universales como el amor unilateral, la frustración, la necesidad de encajar, la pérdida de los objetivos y los sueños rotos, que pueden encajar con cualquier edad.

La mayoría de los actores que participan en la serie son amigos suyos. ¿Escribió los personajes pensando precisamente en ellos? 

Totalmente. Tenía muy claro que si alguien me hubiera censurado el casting, hubiera sido un problema. Aunque los personajes no están basados en ellos, sí que pensé mucho en lo que ofrecen como actores para hacerlos muy a su medida y que pudieran lucirse. Es muy bonito que las relaciones que tenemos fuera de pantalla son muy parecidas a las que tenemos delante.

¿Qué hay de Abril en Dafne, su personaje? 

¡Mucho más de lo que me gustaría!

¿Por qué lo dice? 

Porque cuando trabajas en una serie como esta, que tiene un tono naturalista, lo que pones en el asador es tu manera de hablar, de moverte y de reaccionar. Todo era tan mío que me dio un poquito de inseguridad. Pero poco a poco el personaje fue por su propio camino y acabamos más separadas y eso me sirvió para no verme tan expuesta, que me daba muchísimo pudor. 

¿En qué se parecen entonces?

Aunque Dafne y yo estemos en momentos vitales completamente diferentes, creo que hay mucho paralelismo entre las dos en nuestra manera de vivir las relaciones personales, en nuestros objetivos o en ese punto un poquito pesimista... Hay mucho de ella en mí. En cualquier caso, ella es mucho más compleja que yo, que soy más sencilla.

Cuando participó como actriz en 'El desorden que dejas', dijo que estaba contenta de que su personaje no hiciera ninguna referencia a su transexualidad. Pero ahora, en 'Todo lo otro', lo ha querido mostrar. ¿Por qué?

No es que lo haya querido mostrar, sino que he escrito un personaje para mí y yo soy una actriz trans, así que era inevitable hablar de ello en algún momento. No es relevante que el personaje sea trans, no hay ninguna trama centrada en eso, se pasa por encima, es igual que sea alta o pelirroja. Podía haberlo ignorado, pero en el año 2021 todavía es importante hacer personajes LGTBI que tengan cierta relevancia. Es más, hay pocas ficciones en las que veas un personaje trans que esté totalmente normalizado en su trabajo y con sus amigos. Creo que era bonito hablar de ello, pero sin darle mucha importancia.

"En esta serie todo era tan mío que me creó inseguridad"

La serie comienza con una ruptura, algo que ya había tratado en algunas de sus obras teatrales. ¿Por qué quiso recurrir otra vez a ese tema?

Porque está a la orden del día. A mí lo que me apetecía contar era la historia de una chica enamorada, pero que no necesariamente está buscando el objetivo de estar en pareja. Esta serie no se centra en la ruptura, sino que es el punto de partida para que el personaje se sienta totalmente fuera de lugar, perdida, y para que el castillo de naipes que ha construido se vaya cayendo.

A eso contribuye también la voz en 'off' que pone Alberto Casado, ese Pepito Grillo tan crítico con las acciones de Dafne.

Para mí era importante tener una voz en 'off' por muchos motivos. Sobre todo, porque yo tengo una voz en 'off' en mi cabeza que me destruye todo el rato.

Esa voz no para de decir que Dafne es tonta y ridícula.

¡Es que yo estoy todo el rato pensando en lo tonta que soy y en lo poco capacitada que estoy para hacer las cosas! Y creo que todo el mundo tiene un poco ese Pepito Grillo negativo, así que me apetecía poder estar dentro de la cabeza de los personajes con esa tortura, por así decirlo. Además, tener una voz en off hace que veamos el interior de los personajes y no solo lo que ellos nos están mostrando. Eso era muy rico y acercaba la serie a un tono más cómico, porque es una voz un poco destructiva, pero al mismo tiempo muy divertida.

"Yo también tengo una voz en mi cabeza que me destruye todo el rato"

¿Por eso escogió a Alberto Casado para poner esa voz, famoso por ser el 50% del dúo cómico Pantomima Full, con su humor tan característico?

Quise buscar a alguien como Alberto porque tiene una voz como muy normal, como un personaje más de la ciudad, y no como un locutor que está ahí impostado.

Hablando de ciudad... Madrid cobra mucha relevancia en la serie.

Madrid fue cada vez más importante cuando hacíamos la serie, pero tampoco es que yo quisiera hacer una serie sobre Madrid. Me di cuenta de que tenía mucha relevancia porque representa la sensación de sueño truncado, de gente que va a una ciudad para poder evolucionar, crecer, estar mejor, pero que va perdiendo su objetivo de vista porque va entrando en la rueda de trabajar para pagar, algo en lo que es muy fácil caer: llegas a Madrid para ser actriz, trabajas 40 horas semanales como camarera y eso te quema tanto que pierdes la perspectiva y el objetivo por el que llegaste aquí.

¿Cómo descubrió usted su vocación interpretativa?

Cuando tenía 8 años, porque veía 'Sensación de vivir' y me encantaba. Quería ser Brenda, Kelly, y estar en esa serie para hacer esas tramas tan soprepasadas de dramatismo adolescente. Veía toda esa ficción tan intensa y yo quería estar ahí y dije: yo quiero hacer eso.

Pero no solo ha trabajado de actriz, sino que también se está curtiendo como creadora y ha hecho 'Temporada baja', 'Señoras del (H)AMPA' (junto a Carlos del Hoyo) y ahora 'Todo lo otro', la primera serie española de HBO Max, toda una responsabilidad.

Sí, es una responsabilidad, pero también un regalo maravilloso y estoy muy orgullosa. Creo que empezar con una serie como esta es toda una declaración de intenciones por parte de HBO Max, porque han potenciado mucho la autoría. Me dieron tanta libertad... Creo que es un gesto de la ficción que quieren hacer, confiando en voces diferentes para que sean historias distintas a las que hemos visto anteriormente. 

El sexo en 'Todo lo otro' cobra tanta relevancia como un personaje.

¡Pero gracias a Dios el sexo es un personaje en nuestras vidas, o intentamos que lo sea! Es un personaje y lo hemos tratado como tal y con muchísimo respeto. Agradezco que los actores hayan tenido ese pacto de honestidad con el proyecto para poder mostrar las escenas de sexo de una forma tan orgánica, tan verdadera y tan natural.

Usted también tiene alguna de esas escenas.

Como actriz nunca había hecho una escena de sexo, era mi primera vez. Fue un poco complicado, porque cuando eres directora y actriz y justo hay una escena de sexo es un poco difícil estar con el combo dirigiendo sin nada de ropa. Pero hemos intentado que, sobre todo, sea realista y natural. 

¿Hay posibilidades de que haya más temporadas de la serie?

No es una historia autoconclusiva porque estoy contando un trozo de la vida de los personajes, y la vida no tiene un final hasta que te mueres. Aunque algunas tramas se cierran, otras están abiertas para poder seguir explorándolas y trabajándolas después y que a los personajes les pasen cosas diferentes. Sería superinteresante poder hacerlo.

TEMAS