TÚ Y YO SOMOS TRES
El 'rana' no le guarda rencor a doña Espe
Ferran Monegal
Crítico de televisión
Ferran Monegal
Ferran Monegal
A punto de su regreso a la Sexta, Jordi Évole ha pasado por El hormiguero (A-3 TV). Ha contado maravillas muy sabrosas. Dijo que esa misma mañana estuvo en la cárcel de Lledoners, y que mientras estaba grabando su entrevista con Oriol Junqueras saltó la noticia de que Quim Torra iba a hacer de inmediato una alocución para anunciar lo de las elecciones. Y añadió: «Junqueras no tenía ni idea de lo que iba a decir Torra. Eso demuestra cómo está la relación entre JxCAT y ERC». Efectivamente, están como siempre: como Piolín y el gato Silvestre. En sus conversaciones con presos o expresos de fama y renombre, advirtió Évole que las anécdotas más sabrosas se las ha contado Sandro Rosell, que coincidió en la cárcel con la flor y nata de la más exquisita y adinerada delincuencia. Estuvo con Díaz Ferran, con Rato, con Ignacio González..., y a la pregunta de quién era el puto amo en ese penal, contestó: «El puto amo era Bárcenas. Solía pasearse en batín, con pañuelo anudado al cuello». ¡Ah! Era como el marqués de Soto del Real, y circulaba entre rejas en plan estupendo. Pero el momento más iridiscente fue la conversación que ha tenido Évole con Francisco Granados, el gran depredador del caso Púnica. Nos avanzaron un instante muy hermoso. Se ve a Évole en casa de Granados, admirando las fotos enmarcadas que lucen en su estantería, y muy sorprendido le advirtió: «¡Tienes varias con Esperanza Aguirre! ¿Cómo es posible que exhibas las fotos de quien dijo de ti ‘Me ha salido rana’?». Y Granados contestó: «Aquello me sentó como un tiro, pero no creo que piense eso de mí. La echo mucho de menos».
¡Ahh! La condición humana tiene golpes portentosos. La rana, en lugar sentir por doña Espe un gran rencor, resulta que siente cariño y afecto. Y se deleita cada día contemplando aquellas fotos de los buenos tiempos, cuando Granados y su testaferro Marjaliza metían en cuentas de Suiza y Singapur millones de euros. Bien mirado, si Esperanza Aguirre permitió toda esa depredación, aunque fuera por despiste o distracción, es natural que la rana sienta por ella agradecimiento. En un famoso cuento de los hermanos Grimm, una princesa conoce a una rana y le da un asco enorme. Pero la rana prospera y se transforma en un joven rico y hermoso. ¡Ah! Entonces la princesa le ama enormemente. Ya es eso.
- Barcelona, “decepcionada” y “preocupada” por que la Generalitat anuncie una desalinizadora flotante en el puerto sin avisarle
- García-Castellón y Gadea dejarán sus plazas en la Audiencia Nacional y Pedraz sopesa hacerse con el juzgado del Tsunami, por Ernesto Ekaizer
- El invierno vuelve por Sant Jordi: los meteorólogos alertan del fenómeno que nos espera la próxima semana en Catalunya
- El presidente del PP de Esplugues coló durante años facturas personales como gastos del partido para pagarlas con dinero público
- Airbnb aconseja a los propietarios que no anuncien las piscinas en sus alojamientos turísticos
- Vuelve Moisés a Pasapalabra: el concursante desvela los problemas que sufrió en el pasado y por los que tuvo que abandonar el programa
- DANA a la vista: estas serán las zonas más afectadas
- Sumergir los pies en vinagre, la nueva tendencia que arrasa: estos son sus beneficios