tú y yo somos tres

Cuando la Xunta fumaba con los capos

Ferran

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En TVE los servicios de maquillaje informativo no dan abasto. A los patéticos esfuerzos en los telediarios por maquillar las informaciones sobre el apasionante caso de Cristina Cifuentes y su máster imaginario -hasta Telemadrid, cadena que depende de Cifuentes, ha dado una información mucho más honesta y fiable-, hay que añadir el mal trago de la guerra de reinas en la catedral de Palma. En el No-Do de la monarquía del sábado ('Audiencia abierta') ya no pudieron seguir escondiendo el regio trance y nos decían: "Lo que iba a ser un posado tradicional se transformó en una escena polémica". Pero no nos explicaron en qué consistió la polémica. O sea, siguieron disimulando. ¡Ahh! Reclamo desde aquí un plus salarial para todo este esfuerzo que viene realizando ese selecto y sobrevenido escuadrón de cosmética sobre la marcha que está enquistado en el departamento de informativos de TVE. Entre lo de Bárcenas, Camps, Correa, El Bigotes, la Gürtel inacabable, el 'caso Lezo', y todo lo demás, este grupo de virtuosos del 'photoshop' informativo merece una soldada aparte. Yo no sé qué ocurriría si la serie 'Fariña', en lugar de emitirse en A-3 TV, se emitiese en TVE. Ya sé que eso es imposible. No pasaría los controles de censura previa de la casa. Pero suponiendo que esa estimable serie sobre el narcotráfico en Galicia se hubiese colado en la programación de La 1, ahora tendrían un problema añadido colosal. Esta semana, en la serie, han escenificado la visita ¡del entonces presidente de la Xunta de Galicia! a los traficantes que habian huido a Portugal. Se entrevistan en un hotel de Vilanova de Cerveira. Corría el año 1985. O sea, el presidente era entonces Xerardo Fernández-Albor. El actor que lo interpreta se le parece una barbaridad. La escena es tremenda. El exdirigente se deshace en elogios. Les dice que son grandes ciudadanos, que han traído "riqueza y prosperidad" a Galicia. Y les garantiza que no les pasará nada. Efectivamente. Al que le pasó fue al pobre juez instructor. Lo fulminaron desterrándole a Cantabria.

¡Ah! Esa connivencia, esa camaradería y reparto de favores entre el expresidente (de Alianza Popular) y los traficantes en la actual TVE sería insoportable. Y mucho más teniendo en cuenta un dato: pocos meses después de esta martingala en Portugal, Albor designó como vicepresidente de su Xunta a Mariano Rajoy Brey. ¡Ahh!